Germanico

Germanico

No hay aprendizaje sin error, ni tampoco acierto sin duda. En éste, nuestro mundo, hemos dado por sentadas demasiadas cosas. Y así nos va. Las ideologías y los eslóganes fáciles, los prejuicios y jucios sumarios, los procesos kafkianos al presunto disidente de las fes de moda, los ostracismos a quién sostenga un “pero” de duda razonable a cualquier aseveración generalmente aprobada (que no indudablemente probada), convierten el mundo en el que vivimos en un santuario para la pereza cognitiva y en un infierno para todos, pero especialmente para los que tratan de comprender cabalmente que es lo que realmente está sucediendo -nos está sucediendo.

Normalidad y homosexualidad

Adolphe Quetelet soñó con una física que permitiese comprender y dirigir los fenómenos sociales, a la que se denominó, naturalmente, física social. El ideal, a juicio de Quetelet, era l’homme moyen, el hombre medio. Lo que ahora se denomina «normalidad»…

El Centinela

En la novela El Desierto de los Tártaros, el protagonista, el teniente Giovanni Drogo, pasa toda una vida entregado a la labor de vigilancia de un punto fronterizo otrora caliente, encerrado dentro de las cuatro paredes y las tediosas rutinas…