Germanico

Germanico

No hay aprendizaje sin error, ni tampoco acierto sin duda. En éste, nuestro mundo, hemos dado por sentadas demasiadas cosas. Y así nos va. Las ideologías y los eslóganes fáciles, los prejuicios y jucios sumarios, los procesos kafkianos al presunto disidente de las fes de moda, los ostracismos a quién sostenga un “pero” de duda razonable a cualquier aseveración generalmente aprobada (que no indudablemente probada), convierten el mundo en el que vivimos en un santuario para la pereza cognitiva y en un infierno para todos, pero especialmente para los que tratan de comprender cabalmente que es lo que realmente está sucediendo -nos está sucediendo.

No es país para viejos…

Hace un par de años Loretta y yo fuimos a una conferencia en Corpus Christi y a mi me tocó sentarme al lado de una mujer, era la esposa de no sé quién. Y no paró de hablar, que si…

Fin de partida

Samuel Beckett se dirigió a quienes se disponían a interpretar los cuatro papeles de su lúgubre obra teatral Fin de Partida, poco antes de su estreno: «Debemos arrancar tantas carcajadas como sea posible con esta cosa atroz» En Fin de…

Engañados por la política

De entre las trampas mentales de las que somos habituales víctimas, como usuarios de un cerebro evolucionado por selección natural, podemos destacar algunas por su perniciosa influencia en nuestros juicios y juegos políticos. Pueden leerlo en Libertad Digital.

Sueño de una noche de verano

En 1799 Goya dibujó el misterioso grabado de un hombre dormido sobre su escritorio, con la pluma caída de la mano, al que rodeaban por encima siniestros monstruos voladores. En letras grandes, en el lateral de la mesa, que ocupaba la esquina…