Germanico

Germanico

No hay aprendizaje sin error, ni tampoco acierto sin duda. En éste, nuestro mundo, hemos dado por sentadas demasiadas cosas. Y así nos va. Las ideologías y los eslóganes fáciles, los prejuicios y jucios sumarios, los procesos kafkianos al presunto disidente de las fes de moda, los ostracismos a quién sostenga un “pero” de duda razonable a cualquier aseveración generalmente aprobada (que no indudablemente probada), convierten el mundo en el que vivimos en un santuario para la pereza cognitiva y en un infierno para todos, pero especialmente para los que tratan de comprender cabalmente que es lo que realmente está sucediendo -nos está sucediendo.

El caso Wagner

Friedrich Nietzsche, filósofo apasionado, amó primero y odió después, intensamente, a su contemporáneo y conocido Richard Wagner. Pasó de considerar su arte como la más excelsa expresión del espíritu humano a percibir en el mismo una degeneración casi corporal. Y…

Una pesada cruz

El emperador Juliano trató infructuosamente de resucitar el cadáver del paganismo entre las ruinas del mundo clásico. Fue por ello calificado por la historiografía cristiana posterior como «el apóstata». No se trataba, empero, de un apóstata. Su deseo era restaurar…

Quita y pon de caretas

El socialismo se alimenta de caras, de liderazgos. Dado que es la política su principal instrumento, son las personalidades las que le ponen cara, mientras le echan cara. El socialismo, verdaderamente, tiene rostro humano. El capitalismo, por el contrario, al…