Entre Antonio y Elípticus nos traían una idea del alarmista de cabecera de El Mundo, nuestro catedrático favorito Ruiz de Elvira [–>].
– Ah!, cuando en la oscilación oceánica el calor vuelva a la superficie (de aquí a 5/10 años) nos moriremos de gusto!
No es que el fenómeno merezca perder el tiempo con él, pero está señalando una falacia muy extendida. Sirve para hacer olvidar “La Pausa” en el calentamiento global. ¿Que llevamos unos 20 años sin “calentamiento global” estadísiticamente apreciable [–>]? No importa; es por culpa de unos ciclos oceánicos que están escondiendo el calentamiento en el mar. Pero el ciclo cambiará, y el calor volverá y nos comerá.
El problema que olvida Ruiz de Elvira es que para los alarmistas no había ciclos, hasta que “La Pausa” se ha hecho tan larga que resulta imposible de ocultar. Y crearon sus modelos sin ciclos. Sí, tenían El Niño y La Niña, pero sus efectos se cancelaban en un plazo como de una década. No contaban con los ciclos de décadas, que los pocos climatólogos no carbono-fóbicos señalaban en todos los datos del clima.
Y si ahora los alarmistas se tienen que agarrar a esos ciclos para explicar “La Pausa”, como el mismo Ruiz de Elvira, eso produce algunos cambios en la teoría. Vamos a hacerle unos dibujitos al catetodrático.
Hacia el año 2.000 se podía ver esta evolución de la temperatura global.
¿Se podía pensar con esos datos que el calentamiento era por culpa del CO2? Veamos. Añadamos el CO2.
Se podría explicar la última parte, en la que la temperatura y el CO2 parecen ir de la mano. Y para la parte anterior siempre podemos inventarnos algo. Por ejemplo que desde 1945 hasta 1975 hubo mucha contaminación, por el despegue industrial y la falta de legislación para la limpieza del aire.
Y la teoría nos queda niquelada. Al menos, desde 1950. Para el calentamiento entre 1915 y 1945 no tienen explicación, y por eso lo suelen esconder debajo de la alfombra. Por ejemplo, Tom Wigley le explica a Phil Jones, el 27 de septiembre de 2009 [–>], algunas ideas para corregir el registro de temperatura, y así reducir lo que llama “el blip de los 1940s”. Porque …
It would be good to remove at least part of the 1940s blip, but we are still left with “why the blip”.
Sí, estaría muy bien si podemos eliminar el calentamiento que no podemos explicar. Pero el IPCC se olvida de lo que pasó antes de 1950, y nos explica: la mayor parte del calentamiento desde la mitad del siglo XX es por culpa del hombre pecador. Desde 1950 queda así de bonito:
Pero llega “La Pausa”, y resulta que sí había ciclos naturales, como decían los malditos negacionistas. Y el dibujo cambia.
La temperatura ya no sigue la línea del CO2 en la que están basados los modelos. Lo tunearon para que reprodujeran el calentamiento 1975 – 2000, asumiendo que la contaminación había frenado ese efecto antes de 1975. Pero si hay ciclos, como había, la temperatura se sale del camino marcado.
Vale, ¿y cuál es la diferencia para lo que nos importa? ¿Qué se puede esperar en el futuro si la teoría IPCC fuera cierta (cosa muy dudosa) pero ahora tuviera que contar con los ciclos oceánicos naturales? La diferencia es esta en gráfico de Bob Tisdale [–>], de temperatura de la superficie del mar (al final, la clave):
Las dos líneas rojas son los dos “escenarios” fundamentales de las predicciones del IPCC, según haya más o menos emisiones en el futuro. La línea azul es la projección hasta 2100 del calentamiento observado desde 1950. Y cuanto más dure “La Pausa”, menos calentamiento dará esa línea azul. Que ahora mismo supone un calentamiento como la mitad de lo que dice el IPCC, para un “escenario” medio del IPCC.
Resumiendo para Ruiz de Elvira. Puede que cambie el ciclo y vuelva el calentamiento. Pero el ciclo hace que el calentamiento “antropogénico” sea la mitad. Y eso es un no-problema. Probablemente, una bendición.
Yo solo digo que cuando se agua el wisqui, baja el nivel. O sea, que si se derrite el polo norte, bajará el nivel de los mares. Y siendo humilde, vete tú a saber lo que pase.
Bueno, al final he encontrado lo que buscaba. Cito del artículo de Levitus et al. (2012):
O sea, la temperatura de las aguas oceánicas hasta 2000 m de profundidad ha subido 0,09 ºC entre 1955 y 2010.
http://data.nodc.noaa.gov/woa/PUBLICATIONS/grlheat12.pdf
Es que te perdiste la entrada anterior, con la discusión con Hudson. Se lo dije como siete veces, redondeando la cifra a 0,1ºC.
https://desdeelexilio.com/2014/08/28/la-version-buen-rollito-del-alarmismo-climatico-hablando-con-hudson/
Pero vamos a aclararnos. Los modelos en los que se basa la alarma meten calor en el mar. Todos. Entonces la cuestión, para encontrar el «calor perdido» (el famoso «missing heat» de Trenberth) es si ese calentamiento de Levitus es más o menos que el de los modelos. Y es menos. Como la mitad. Por eso hablaban de que estaría escondido «en el fondo del mar». Debajo de los 2.000 metros. Como no se mide, lo tienen a huevo.
Este trabajo del Atlántico no tiene que ver con eso. Ni mide todo el océano, ni compara con los modelos. Explica (ejem) «La Pausa». Pero si explica La Pausa, también explica la No Pausa. Y en el sentido que perjudica a los alarmistas.
Al final es un juego de manos. Los alarmistas te enseñan una carta, pero cuidando de ocultar las demás.
Pues sí, me la he perdido. Había leído la entrada, pero tal vez en el otro sitio porque los comentarios no me suenan de nada. Ya me pongo al día, que me puede venir bien.
Vale, si la contaminación atmósferica de la posguerra hasta la crisis del 73 y las consiguientes medidas anticontaminación (hechas para reducir consumo de petróleo en realidad) es imaginaria, ha de ser también imaginaria la contaminación atmosférica que actualmente sufren China, la India y Estados Unidos por la quema masiva de carbón de baja calidad.
Podría explicar total o parcialmente la pausa actual, por lo que será imaginaria tal contaminación. Las imágenes de ciudades cubiertas por smog son photoshop y los daños por el óxido de aluminio procedente de las cenizas del carbón en USA es… ah, ya, Chemtrails.
Resuelto, seguimos en la misma situación que en 1800, todo controlado.
Saludos
Hudson, es un error de sintaxis, por abreviar. Probablemente viene de esas elipses brutales de las que tanto abusamos los vascos. (Efecto) imaginario (de la) contaminación = contaminación imaginaria.
Y es tan imaginario ese efecto, que ya lo han tenido que reducir entre el informe IPCC de 2007, y el de 2013. ¿Sabes por qué? ¡¡¡Por la pausa!!! Y de ahí, aumentar el margen de calentamiento «más probable» para la teoría, pasando de 2-4,5ºC a 1,5-4,5ºC.
Resumiendo. Trataba de decir «efecto imaginario de la contaminación», usando el mínimo posible de palabras. Y se me ha ido la mano. Ya siento. Gracias por señalarlo.
Ruiz de Elvira menciona el estudio de Chen y Tung. En ese estudio se afirma que la Pausa se debe a la circulación oceánica en el Atlántico y no a la circulación oceánica en el Pacífico tropical (Niño/Niña). Sí es cierto que hay estudios previos que se centran en el Pacífico tropical.
Por otra parte, Ka-Kit Tung publicó anteriormente otro artículo en cuyo resumen («abstract») puede leerse: «a revised picture is emerging that gives a consistent attribution for each multidecadal episode of warming and cooling in recent history, and suggests that the anthropogenic global warming trends might have been overestimated by a factor of two in the second half of the 20th century [se supone que el hombre no es responsable del calentamiento del planeta en la primera mitad]» (vía Nic Lewis en Bishop Hill). Es decir, no he leído el artículo mencionado por Ruiz de Elvira, pero parece que debe interpretarse en el sentido de «reducir» la responsabilidad del hombre en el calentamiento global.
http://bishophill.squarespace.com/blog/2014/8/22/lewis-on-chen-and-tung.html
Aunque sea off-topic: una cosa son las medidas contra la contaminación y otra cosa distinta las medidas para reducir el consumo de petróleo. Tras las dos crisis petrolíferas, Europa adoptó medidas para reducir el consumo de petróleo, medidas que han tenido como efecto secundario «reducir» la contaminación, no en el sentido literal (ya que ahora hay muchos más coches que entonces), sino en el sentido de que la contaminación es menor que la que habría sido en otro caso.
Pero lo contrario no es cierto. De hecho, hay medidas contra la contaminación que aumentan el consumo de petróleo, como la sustitución de calderas de carbón por calderas de gasóleo o el uso obligatorio de catalizador en los motores de combustión interna.
Como he comentado, no he leído el artículo de Chen y Tung citado anteriormente. Así que me ha sorprendido leer lo siguiente en uno de los comentarios a la entrada citada anteriormente, comentario del propio Nic Lewis: «And to be fair to Chen and Tung, they do write in the paper that their mechanism does not allow the Atlantic ocean surface to start cooling before 2006. Moreover, Tung’s 2013 PNAS paper shows the AMO signal (measured at the surface) not having materially declined since then, up to 2011.»
O sea, y tal vez esté equivocado, no acabo de ver cómo la circulación oceánica en el Atlántico puede explicar la pausa.
Gracias, Oscar84.
Sí, es obvio que la idea nueva de «calor encontrado» en el Atlántico no es calor «inyectado» en el área de El Niño. Por eso decía que son dos mecanismos muy diferentes; que Ruiz de Elvira no lo menciona; y que no es lo que apunta Hudson.
Pero lo más relevante es que no es un calor suficiente para la alarma del clima.
– O sea, y tal vez esté equivocado, no acabo de ver cómo la circulación oceánica en el Atlántico puede explicar la pausa.
Creo que no estás distinguiendo calor en agua de superficie, o por debajo. La AMO es en supericie.
Tienes razón, pero no es una confusión, es que no me he dado cuenta de que estaba hablando de la temperatura superficial del océano. Con razón me parecía raro. Fallo por mi parte.
Después de enviar el comentario, he encontrado valores del OHC en la NOAA, (NODC, basado en Levitus et alii, 2012). En la gráfica de 0-2000 m, no veo una relación entre la MST y el OHC en el periodo 1970-2014. Pero, vamos, esto es una disquisición de aficionado.
http://www.nodc.noaa.gov/OC5/3M_HEAT_CONTENT/
Una cosa más. Es un tanto sorprendente cómo el mismo estudio es aducido a su favor por ambas partes: mientras los alarmistas encuentran el calor que les faltaba, los escépticos inciden en que el mecanismo propuesto no está relacionado con el CO2.
Y otra cosa más, la Revista de Obras Públicas (Julio-Agosto de 2014, de pago) ha publicado sendos artículos de Antonio Serrano y de Antonio Ruiz de Elvira con el mismo sesgo alarmista. Por lo menos, Ruiz de Elvira empieza su artículo diciendo que expone una «opinión científica». Algo es algo.
Un saludo a todos.
– Una cosa más. Es un tanto sorprendente cómo el mismo estudio es aducido a su favor por ambas partes: mientras los alarmistas encuentran el calor que les faltaba, los escépticos inciden en que el mecanismo propuesto no está relacionado con el CO2.
No es muy sorprendente. Una de las dos partes miente, y eso ya lo sabíamos.
Alarmistas: La pausa no es pausa, porque el calor se está escondiendo en el Atlántico.
Escépticos: ¿Y de cuánto calor hablas, monada? Porque si ahora un ciclo oceánico se está llevando *todo* el calor que produce el CO2, eso quiere decir que en la fase anterior del ciclo, la mitad del calor no era del CO2. Y como vuestra predicción se basó en aquel calentamiento, ahora se queda en la mitad. Y la mitad de «unos 3ºC» por doblar el CO2, son «unos 1,5ºC». No hay problema.
Bueno, eso si te tomas este estudio a pies juntillas. No deberías.
Yo, ya sabéis que no soy científico…. pero siempre he tenido claro que el calor sube y el frío baja. No hace falta mas que entrar en el portal de un edificio de unas cuantas plantas o irse al sótano de la casa para comprobar cómo allí hace fresquito mientras que si te subes al último descansillo de la escalera o la buhardilla, hace un calor que te mueres… Ahora mismo lo podrán comprobar todos, Ruiz Elvira incluido…
Por eso, y aunque el agua es un medio distinto del aire… creo, porque en la piscina también pasa, el agua caliente tenderá a irse para arriba y la fría hacia abajo…. con lo cual eso de que el calor «se esconce en los océanos….» ¿debajo del agua fría? ¿no tiene un efecto considerable en el clima el hecho de que el agua de mar esté caliente…..?
Ya digo que lo mismo hay algunas razones ocultas dentro de la termodinámica de fluidos a nivel oceánico…. pero yo desde mi ignorancia científica a nivel planetario y hablando sólo referido a lo que cotidianamente puedo observar… no lo entiendo….
Es la sal, Bastiat. También hace al agua mucho más densa.
El agua se calienta en los trópicos, con todo el solazo vertical. Hay mucha evaporación, lo que quiere decir que se pierde parte del agua, y la sal se queda. O sea, el agua se ha salinizado.
Luego llega a los polos. Ha perdido mucho del calor por el camino, pero no todo. Y conserva toda la sal. Al final choca con una agua algo más fría, pero mucho menos salada. Y se hunde por lo salada que está.
O sea un agua a 2ºC muy salada pesa más que otra menos salada a 0ºC. Y se hunde. Son cifras de memoria, no les hagas mucho caso. Pero la idea es esa.
Aparte, el agua dulce más densa creo que es a 2º y no a 0º. Pero eso es para la dulce, no para la salada.
Añado nota. Por eso es más salada el agua en el Mediterráneo. Se evapora más agua de la que le llueve o le llega por los ríos.
Copio:
Su conexión con el océano Atlántico por el estrecho de Gibraltar permite la entrada de sus aguas, más frías pero menos saladas, en superficie. A la vez, el agua del Mediterráneo, más salada sale por debajo. El volumen de agua que entra por Gibraltar (entre 36000 y 38000 Km3 /año) es superior al que sale. Por lo tanto, el Mediterráneo gana agua en el intercambio con el Atlántico pero la pierde hacia la atmósfera, ya que la evaporación (3300 Km3 /año) dentro de la cuenca es superior a la suma de la precipitación (880 Km3 /año) y la aportación de los ríos (500 Km3 /año). Funciona pues, como una cuenca de concentración.
http://www.icm.csic.es/icmdivulga/es/mediterraneo-mare-nostrum-02.htm
Bien, pues esa agua muy salada que sale del Mediterráneo también se va al fondo, llevando calor para allá. Es otro ejemplo; la que cuenta de verdad es la de los polos.
Gracias, Plaza. Ya he aprendido una cosa nueva.
Y sorprendente….
Hay más formas de transferencia de energía entre la atmósfera y el oceáno. El Niño y la Niña son las más significativas.
Simplificando mucho, la Niña se produce cuando los vientos superficiales dominantes del Pacífico soplan con más fuerza y trasladan el agua caliente ecuatorial hacia el Oeste. Ese vacío es llenado con agua fría desde el fondo de la costa sudamericana, lo que crea una zona de gradiente térmico absorbiendo calor de la atmósfera y almacenándolo en el oceáno por tanto.
El Niño por el contrario es consecuencia de un cambio en los vientos dominantes que acumula agua caliente en las zonas ecuatoriales, el agua se calienta por el sol y no tiene tiempo de dispersarse o el viento no le deja y se crea un gradiente térmico contrario que permite evacuar calor desde el oceáno hacia la atmósfera.
Saludos
Eso estaría muy bien, Hudson, si nos explicas el mecanismo por el que el mar «absorbe calor de la atmósfera». Si quieres decir entrega menos calor a la atmósfera (cuando hay La Niña), podría tener algún sentido.
En todo caso, ese mecanismo no explica la «inyección» de calor en el már más abajo de unos 300 metros. Y ahí no está el «calor perdido» que buscan. Las boyas Argos no lo han encontrado (tu NOAA famosa). Por eso dice el tonto de Ruiz de Elvira, en el artículo citado:
– En algunos posts de este blog anteriores al presente yo sugería ese mismo calentamiento pero a profundidades de 300 metros. Estos investigadores lo sitúan por debajo de esta profundidad, entre los 700 y los 1500 metros.
O sea, «estos investigadores» hablan de otra cosa, y Ruiz de Elvira se cuida muy mucho de decirlo. O no lo sabe.
Pero hay más. Tu mecanismo cíclico, de épocas de unos 30 años en los que predomina El Niño, seguidas por otras en las que predomina La Niña, pueden explicar La Pausa. Pero entonces eso supone que la No Pausa produjo buena parte del calentamiento achacado al CO2, y el efecto del CO2 es mucho menos de lo que pensaban. Que es, justamente, lo que dicen los «negacionistas». Lindzen, Spencer, Pielke, y ahora también Curry.
Y lo que, modestamente, señala este artículo. Sin entrar en profundidades.