Hoy he estado en una reunión con políticos y profesionales de la medicina. Les dejo tres ideas para el debate:
– El día vegetariano, la prohibición de fumar o la denuncia de la obesidad como enemiga de la salud del pueblo son una manera barata de obtener nuevos márgenes de acción política; y los políticos de todos los colores ya se han dado cuenta.
– Un fumador gay con un vaso de cerveza en la mano – esa es probablemente la peor amenaza imaginable en la Rusia de Putin.
– Dictar a los demás cómo tienen que vivir, liberar al «maestro» que llevamos dentro siempre ha sido más atractivo que dejar que los vecinos vivan como les parezca.
Ya les digo yo que, en el fondo, se trata de poder a de dinero: Subvenciones sanitarias; y que existen alternativas: ¿Está justificada la sanidad pública?; porque las alternativas son absolutamente necesarias: Sanidad nacionalsocialista
Venga, se abre el debate 🙂
JFM. Torkan, he escrito un miniartículo al calor de vuestra discusión:
Es por su bien, el de los suyos y el nuestro
Ya lo he visto, me encanta que intervengas. Y a JFM, le agradezco sus críticas razonadas aunque no las comparta.
Vaya, DonNadie. Nada de lo que digo le parece bien 😉
O a lo mejor es que le da igual lo que digo, porque lo que usted quiere no es debatir realmente las ideas, lo que quiere es fastidiar donde pueda.
No busca “la razón” sino “tener razón”, y anda por todo el blog jugando al “verás como te pillo”. A ver donde encuentra un error o un descuido en el que poder cebarse.
Personalmente dejé ese estilo de discusión junto con la adolescencia, y no he visto que se use mucho por aquí. Veo que las ideas se debaten buscando acercarse mas a la verdad, y no intentando ganar la discusión con sofismos y trucos retóricos. Es una de las razones por la que me gusta este sitio, al que, por cierto, soy un recién llegado, igual que usted.
¡A, no! Que usted ya estuvo por aquí antes, y por lo visto le ofendieron gravemente en aquella ocasión. (Yo no estaba por aquí entonces, así que yo no fui 😉 )
Y ahora vuelve usted en busca de VENGANZA.
No está usted defendiendo ideas socialdemócratas porque crea firmemente en ellas y se sienta en la responsabilidad de hacerlo, sino simplemente para intentar joder a estos malvados liberales todo lo que pueda, porque lo humillaron.
VENGANZA. Y de que forma mas ruin la ha ejercido. Después de dar vueltas por todo el blog dando zarpazos como un oso herido, elige el hilo que pone Don Luis para celebrar un bien merecido éxito y se dedica a meterle toda la mierda que puede. Hasta los mafiosos respetan esas cosas y no van a matar al cappo rival el día que celebra el bautizo de su hija. Pero usted si.
Si tuviera usted el mas mínimo estilo, decencia, se hubiera contenido y lo hubiera atacado en cualquier otro hilo, pero no, le pudo la rabia y la mezquindad y encima fue a embestir contra quien, probablemente, menos lo merecía en todo el sitio.
¡En fin…! 🙁
Si me pidieran que resumiera el comentario que usted critica en una sola frase, yo diría: No es eficaz regularlo todo y además, a lo mejor no es conveniente para las personas el hacerlo. Creo que estas son las dos ideas que planteo.
Si usted quisiera de verdad debatir alguna de ellas, empezaría por nombrarlas y argumentaría seriamente contra ellas, en ese caso, yo le respondería y, como tengo serias dudas acerca de esa segunda idea, razón por la que escribo “A lo mejor no es conveniente” (en lugar de afirmarlo) podría terminar dándole la razón. En lugar de ello, se va usted a lo anecdótico del post, usándolo para definir el carácter que usted cree que tengo y termina mandándome a una cueva, buen ejemplo de su forma de discutir. Yo he llegado aquí con serias dudas respecto a las tesis liberales y las voy exponiendo, hasta ahora todos me han contestado y tratado con exquisita cortesía, cosa que agradezco enormemente, excepto usted.
Como usted no quiere de verdad debatir sino tocar las narices, no veo por qué tengo que contestarle. Esperaré a que venga otra persona a quien de verdad le interese debatir el tema y ya desarrollaré las ideas entonces.
Y me estoy conteniendo, DonNadie. Le ruego que no me tire de la lengua. De verdad, hace años que dejaron de gustarme estos juegos, pero se jugar si es necesario.
Como esta idea es suya y no mía, le respondo 😉
Me parece genial que haya cinturones de seguridad en los coches. Debe haberlos para que quien quiera que suba al coche pueda ponérselo y aumentar de ese modo su seguridad.
Sin embargo no entiendo por qué hay una ley que me obliga a ponérmelo. Yo no pongo en peligro la vida de terceros por no llevarlo, solo mi propia vida, si soy sensato me lo pondré pero no entiendo que tenga que ser obligatorio.
Podría llegar a entender (con matices) que la seguridad social no me atienda si tengo un accidente sin llevar el cinturón. Pero no que exista una normativa que me obligue a usarlo si yo no quiero.
Y la de su mujer a la que jodera la vida si se queda usted invalido o la de sus hijos que se quedaran huerfanos y no podran cursar estudios. Y en caso de que usted se quede invalido, ya sea su mujer o nosotros, la de los que paguen la pension para que usted no se muera de hambre. El problema es que aunque usted tenga razon en teoria, el ejemplo que usted utiliza es muy malo.
Y no siquiera hé entrado en las perdidas sociales si usted es un miembro particularmente util de la socoedad. Ponagamos, por ejemplo, que usted investiga un metodo para detectar el cancer cuando es curable. Oue su descubrimiento se retrasara meses o anyos para desgracia de los pacientes.
Hombre, todo es opinable. A lo mejor mi mujer y mis hijos se alegraban un montón de librarse de mi y cobrar el seguro por mi muerte. 😉
Ya he dicho, por otra parte, que podría entender que se elaborase una ley para que la seguridad social no se hiciese cargo de mi caso si no llevaba cinturón, y eso incluiría no pagarme ninguna pensión. Si yo no lo quiero llevar y soy sensato, tendré que hacerme un buen seguro.
Lo de las pérdidas sociales aún lo admito menos, o sea que si soy un miembro valioso de la sociedad, por serlo aún tengo que ser menos libre que los demás. Habrá que controlar que no coma demasiado colesterol y que no haga deportes de riesgo.
A mi si me parece un buen ejemplo. De cómo el estado nos quita pequeñas libertades por nuestro bien… que no son justificables. Y de como las vamos aceptando porque cada una que nos quitan es pequeña, y es por nuestro bien, y total, yo ya me ponía el cinturón.
Pero cada una que aceptamos, justifica la siguiente. Y además, esa libertad ya no se devuelve y se van sumando. Al final nos vamos acostumbrando a que es lo natural y por nuestro bien y terminamos aceptando la Ley Corcuera. Aún está vigente hasta donde yo se, y aunque se planteó un gran debate en su momento, me pregunto que pasaría hoy si se hiciese una ley similar en cuanto a violación de la libertad individual. Cada año estamos mas preparados para aceptar privaciones de libertad “por nuestro bien”.
A pesar de lo dicho, le doy la razón, JFM, en que no es el mejor ejemplo. Pero es el que venía a cuento. Seguro que se nos ocurren mejores 🙂
Mi respuesta ha sido correcta. Usted defiende cosas absurdas y yo se lo manifiesto claramente. No veo el problema.
Sobre el cinturón: el caso es que no vive usted solo sino que en el mundo hay más gente. Y todos, tarde o temprano, cometemos errores. Yo puedo cometer un error tonto que provoque un accidente con usted que con cinturón no tendría mayores consecuencias, pero que si no lo lleva usted puesto puede ser gravísimo. Puestos a elegir el mal menor, el cinturón no hace ningún daño y no cargamos a los demás con enormes responsabilidades innecesariamente.
Ahora bien, si usted quiere manejar una moto a alta velocidad con el culo, sin casco y con los ojos tapados, en su finca particular llena de leones hambrientos, por mí no hay problema.
No, DonNadie, su respuesta no es correcta; Le diré por qué.
En primer lugar, dice usted:
No es lo que yo estoy diciendo, ni lo que sugiero. Yo uso una metáfora visual que representa una sociedad que pretende (sin conseguirlo) hacer leyes que nos protejan de todo, sobre todo de nosotros mismos y de la torpeza e irresponsabilidad propias que el estado nos supone.
Usted utiliza esa metáfora y la lleva mas allá con la única intención de empezar a definir mi personalidad como el estereotipo de tío macho e insensato al que no gustan las “mariconadas”.
Después dice:
<Dice Torkan: “Pero ese riesgo es lo que le da sentido a la vida”
Claro que sí. Si se lo da a usted, se lo tiene que dar a los demás por narices>
Que es un recurso que usa usted a menudo, poner en boca de otro palabras o ideas que no ha dicho. No se deduce de lo que digo que quiera imponer mi idea a nadie. Planteo justamente una duda respecto a la conveniencia de que nos impongan a la fuerza una protección que no pedimos ni realmente necesitamos. Pero así refuerza usted la idea que está desarrollando sobre mi forma de ser. Soy un bruto que intento imponerme a los demás a la fuerza.
Por último, dice que yo debería vivir en una cueva “A lo cromagnon” lo que completa la definición que quiere transmitir de mi. Soy un hombre de las cavernas. Razón por la cual, no se me puede tomar en serio.
No está usted criticando mis ideas, me está descalificando a mi para que mis ideas se descalifiquen.
Al final, sofismos y trucos retóricos. E insultos velados. ¿Piensa usted que la gente que visita este blog es idiota y no es capaz de ver lo que está usted haciendo?
Por cierto, nuestra especie es la cromagnon, así que, viva en cuevas o ciudades, “a lo cromagnon” es como vivimos todos.
Después de En primer lugar, dice usted: va lo siguiente:
No se por qué, se ha borrado al publicar el post.
Pues se lo ha vuelto a comer, a ver ahora.
Eso, eso, que vayan quitando esas mariconadas del cinturón en el coche para no salir volando por el parabrisas, del airbag para no romperte la cara en el volante, y demás “blandeces”. Coches para hombres de verdad: eso es lo que necesitamos.
La razón por la que no existe la compra-venta de órganos es para que los pobres también puedan tener uno si lo necesitan. De la misma manera que hay pobres que necesitan un coche pero no pueden tenerlo porque no tienen dinero para comprarlo, habría pobres que no podrían comprar un órgano por falta de dinero y se morirían. Ya sé que les parecerá mentira, pero todavía hay gente que se preocupa de los pobres: no todo el mundo es liberal.
Dice Torkan : «No tengo claro que quiera vivir en el. Un mundo donde las aceras sean blanditas por si te caes, las esquinas estén acolchadas, las farolas sean de plástico»
Eso, eso, que vayan quitando esas mariconadas del cinturón en el coche para no salir volando por el parabrisas, del airbag para no romperte la cara en el volante, y demás «blandeces». Coches para hombres de verdad: eso es lo que necesitamos.
Dice Torkan: «Pero ese riesgo es lo que le da sentido a la vida»
Claro que sí. Si se lo da a usted, se lo tiene que dar a los demás por narices. Lo que no entiendo es por qué no vive usted en una cueva «a lo cromagnon» para evitarse todas estas «blandeces» de la vida moderna. Será el estado socialista, que le obliga a vivir con semáforos, alimentos en condiciones, aviones revisados minuciosamente y todo eso, seguro. El estado: siempre quitándonos la diversión.
En lo que no caen, o no quieren caer, es en que no es posible regularlo todo. Incluso suponiéndoles bienintencionados. Porque es verdad que hay padres así de canallas o de ceporros, que operarían a sus hijos para que se parecieran a Michael Jackson, y es horrible, y molaría poder evitarlo. Pero por mas que legisles no lo puedes evitar, el padre canalla operará a su hijo en otro lugar donde no rija esa ley o aparecerá un mercado negro de cirujanos sin títulos ni escrúpulos, que operarán sin las mínimas condiciones, aumentando aún mas el riesgo para la vida del pobre niño. El aborto en España en la época en que estaba prohibido es un buen ejemplo. Las niñas con posibles se iban a Londres y las que no, no por ello dejaban de abortar, lo hacían aquí en clínicas (por llamarles de alguna manera) ilegales donde salir vivas era casi un milagro. Y no quisiera que entrásemos en los aspectos éticos del aborto, por favor, ese es otro debate.
El caso es que no solo no se puede regular todo, intentando proteger todo lo posible al ciudadano (nótese que estoy suponiendo buena voluntad a los que lo hacen 😉 ). Es que a lo mejor no es conveniente para las personas. La vida es riesgo, lucha, aprendizaje. La vida es caerse y hacerse daño y aprender de ello. Y a veces uno se mata en el proceso, o le pasa algo grave, y es una putada que sea así. Pero ese riesgo es lo que le da sentido a la vida. La alternativa, el “mundo de teletuvis” que intentan crear, un mundo donde lo peor que te puede pasar es que te de una patada un conejo, porque morderte no puede, no tienen dientes. No tengo claro que quiera vivir en el. Un mundo donde las aceras sean blanditas por si te caes, las esquinas estén acolchadas, las farolas sean de plástico por si andas descuidado y te das con ellas. Todo previsto y preparado para que no te pueda pasar nada malo.
Parece un mundo guay, pero piénsalo bien… no mola. Me viene a la memoria la isla de los lotófagos de la Odiséa, parece el paraíso, no hay preocupaciones, solo Ulises se da cuenta de que así, la vida, deja de ser vida.
No se si he sido muy coherente en este comentario, es que me ha salido muy de dentro 😉
Y lo de los vicios… es que son muy malos Luis, menos mal que tenemos campañas para prevenirlos. Creo que la próxima es esta 😉
VIVIR PUEDE MATAR.
A menudo, vivir produce enfermedades.
Vivir con intensidad produce excitación y cansancio.
Vivir en exceso produce arrugas en la piel, patas de gallo, enfermedades degenerativas e impotencia. (Comprobado científicamente)
Al vivir, produce usted grandes cantidades de anhídrido carbónico y metano, gases de efecto invernadero que contribuyen al calentamiento global produciendo daños a otras personas a miles de kilómetros alrededor de usted.
Vivir le hará enfrentarse a problemas cada día de su vida.
Con lo que gasta usted en mantener el mal vicio de vivir, habría pagado ya su hipoteca hace años.
Si padece usted este vicio, le recomendamos que lo abandone cuanto antes. Podemos ayudarle.
Consulte con su farmacéutico.
Comentario me gustaría hacer. Donantes de médula ósea. La gente dona gratis. Podría hacerlo por dinero, y sería legítimo, pero lo hacen altruistamente. Y es genial que la gente done altruistamente. Pero me preocupa que no se pueda hacer por dinero.
Es el mismo problema que con el cordón umbilical: en España los padres, tras un nacimiento, pueden pedir que lo conserven, pero no para el nacido o para quien ellos quieran. Se usará al azar para quién lo necesite, sin que su dueño (sea la madre o el niño, distinción académica, pero que ahora no viene a cuento) pueda decidir sobre su destino. Por eso se usa un vacío legal y en ciertos centros se recoge y se conserva en el extranjero, a disposición de los padres. Pues ya se está escuchando gente pidiendo que se prohíba hacerlo…
Completamente de acuerdo con Luis. Si no somos dueños absolutos de nuestro propio cuerpo apaga y vámonos porque sí el estado invade! cómo de hecho lo hace!, lo que podemos y no podemos hacer con nuestro propio cuerpo lo que nos plazca entonces es que el mismo concepto de libertad sin dañar a nadie es una quimera
El biopoder de Foucault en todo su explendor. Miedo da pensar hasta donde nos estamos dejando llevar.
No te vayas a la RDA, en estos momentos CDU y SPD debaten (mejor dicho, lo pone en su borrador de contrato de gobierno) prohibir las operaciones estéticas a menores de edad. Es decir, si tu hija de 17 años padece depresión por un problema plástico en, pongamos la cara, ni ella ni tú teneis derecho a operarla. Ha de esperar a cumplir los 18, o suicidarse antes.
Es para proteger a los niños de seis añsos de padres que quieren que se parezcan a Michael Jackson, me han contado 🙁
¿Y como van a evitar que la gente se vaya a hacer tatuajes o operaciones de estética, digamos a Mallorca?. ¿O que se haga un tatauje de henna en un viaje de fin de curso … ?.
Eso sin entrar en consideraciones médicas. Se me ocurre un tabique de nariz desviado…
Eso no podrán evitarlo. Es lo absurdo del asunto (entre otras cosas): el estado sólo «protege» a los menores en casa. Sales y ya no 😛
Esta mañana se comentó algo al respecto. Ninguno de los cirujanos presentes en la sala recordaba haber hecho nunca jamás una estética a un menor que no fuese necesaria. Nadie acudió jamás a su consulta a que le agrandasen los pechos a la niña. Es que es absurdo.
Creo que en tu ultimo argumento te pasas. Con tu logica puesto que el Estado no puede impedirl a los padres que se lleven a su hija al estanjero y la vendan a una red de prostitucion o la sacrifiquen a Ctulhu deberia ser legal la prostitucion infantil y los sacrificios humanos.
No es eso lo que he querido decir. De hecho no lo hago 🙂
Lo que quiero decir es que la verdadera protección del menor empieza en casa (en la familia, no en el país X), que ningún madre/padre en sus cabales llevaría a su hijo/hija a un cirujano para agrandarle el glande/pecho y que ningú cirujano de verdad, llegado el caso, se prestaría a tales estupideces. La prostitución infantil y los sacrificios humanos atentan contra la vida y la propiedad de terceros. No son morales. Pero… si yo, en pleno estado de consciencia y salud mental decido suicidarme dejando que me comas tú … quién me/te/nos lo iba a prohibir? Quién es el dueño de mi vida? O de mi carne?
Lo de la prostitución de menores, por no dejar hilos sueltos…. quién es «menor»? Supongamos que nos ponemos de acuerdo en que una persona con 15 años es perfectamente consciente de lo que hace, y con menos no … no era este el tema del post :D:D:D
En la RDA hacerse un tatuaje (cualquiera, desde un dragón en la espalda hasta una flor en el tobillo) estaba prohibido. El Estado tenía jurisdicción sobre tu piel.