Análisis hay muchos. Y los que quedan. Yo quiero manifestar mi solidaridad más absoluta con TODAS las víctimas del terrorismo etarra. Es por ello que transcribo el contenido íntegro del comunicado del «Foro de Ermua» que tan amablemente me ha sido enviado desde su departamento de prensa.
La desunión entre el PSE y el PP no ha hecho posible conseguir el cambio político en Euskadi. El nuevo Gobierno nacionalista, que requiere del apoyo de EHAK-ETA para la investidura, tendrá enfrente una tenaz oposición constitucionalista.
Madrid. 17 de abril, 2005. 22:00h. Las elecciones autonómicas celebradas hoy en el País Vasco, y la campaña electoral previa, han tenido lugar -bajo una aparente normalidad- en análogas condiciones de graves carencias democráticas que todas los anteriores comicios desde la Transición. Los candidatos constitucionalistas han tenido que ir protegidos por escoltas, siendo acosados en varias ocasiones por abertzales; su acceso a las poblaciones rurales -en las que la presión abertzale es mayor- ha seguido estando muy restringido; incluso en el centro de San Sebastián, personas que repartían propaganda electoral hace unos días contra el Plan Ibarretxe se han visto violentamente agredidas; se han reproducido actos de kale borroka, en forma de pintadas, amenazas escritas, daños a sedes de partidos políticos, y otras. Hoy mismo, candidatos como María San Gil, han sido recibidos dentro de sus colegios electorales con pancartas abertzales.
Además de los anteriores impedimentos a la libre acción electoral de los no nacionalistas, una circunstancias adicional ha degradado particularmente la limpieza de este proceso y de la consulta electorales. El Gobierno de España no ha impedido -recurriendo a los Tribunales- la presencia en la campaña de las candidaturas del PCTV-EHAK que, en el presente, está sobradamente demostrado encontrarse bajo el completo control de Batasuna. Careciendo, incluso, de cuenta bancaria alguna milagrosamente han conseguido desplegar una gran presencia de carteles, mítines y automóviles en todos los rincones de Euskadi y, siendo las primeras elecciones a las que se presentan, conseguir 9 parlamentarios.
Finalmente, como vienen poniendo de relieve las Comisiones de la Diáspora Democrática Vasca, el mismo censo electoral vasco está alterado a favor del nacionalismo al haberse provocado la salida de más de 240.000 ciudadanos del País Vasco a otras regiones españolas por la acción conjunta del terrorismo de la rama criminal del nacionalismo y el acoso diario hacia quienes no pensamos como ellos por parte del mal llamado nacionalismo moderado. Aquella cifra supone el 10 por ciento de la población total de Euskadi.
La coalición PNV-EA, que había pedido a los electores un apoyo plebiscitario a su Plan secesionista, ha sufrido un importante revés, bajando de 33 a 29 diputados, de los 75 que componen la Cámara. Para poder gobernar el PNV necesitará en la investidura el apoyo activo no solo de Aralar (1 diputado) y de IU-EB (3 escaños), sino también de los 9 parlamentarios de EHAK-PCTV. Se reconstituiría, por tanto, en la Cámara de Vitoria el frente del nacionalismo terrorista con el que se pretende moderado, en lo que supondría una reedición del Pacto de Estella-Lizarra de septiembre de 1998.
Las direcciones del PSE-EE y del PP del País Vasco y sus respectivas direcciones nacionales en Madrid, han de extraer las lecciones políticas de esta derrota electoral y adaptar su estrategias en consecuencia. Como ya hemos dicho muchos constitucionalistas, ninguno de los dos partidos marchando por su cuenta podrá nunca arrebatar el poder político al nacionalismo en Euskadi. Se impone retomar las actitudes de estrecha colaboración entre ambos partidos constitucionalistas que tan excelentes resultados ofrecieron en las anteriores elecciones de mayo de 2001.
Denunciar sistemáticamente las políticas de este nuevo frente nacionalista y, en particular, el Plan Ibarretxe que tratarán -sin duda- de sacar adelante será una labor constante para los constitucionalistas. Así como restringir todo lo posible las arbitrariedades e ilegalidades que los gobernantes nacionalistas están acostumbrados a imponernos, trabajando por hacer más presente el imperio de la Ley en nuestra Comunidad Autónoma. Y también sacar a la luz las numerosas connivencias que estos gobernantes reestablecerán con las organizaciones del entorno de ETA. Las organizaciones y personas constitucionalistas, forjadas en la lucha contra el nacionalismo, no nos daremos por vencidas por esta derrota electoral y perseveraremos hasta conseguir el cambio político en el País Vasco. Por la Constitución y el Estatuto de Gernika.
Portavoz del Foro Ermua: Rubén Múgica
Vicepresidente del Foro Ermua: Mikel Buesa
Vocal Junta Directiva: Iñaki Ezkerra
Nota para despistados: Sí, soy liberal. Sí,creo en España como nación. Sí, propongo y defiendo un Estado mínimo. Sí, creo que un sistema republicano aportaría soluciones. Sí, creo que, según la ley, la soberanía es de TODOS los españoles. Sí, creo que hay otras formas de administrar las inquietudes de todos distintas del estado de autonomías. No, no creo que un estado centralista tenga ventajas. Sí, creo que la riqueza sólo surge de la diversidad puesta al servicio de TODOS.
PD: Gracias a todos los que ayer visitaron y animaron «la Cafetería». Perdón a quienes no pudieron entrar. La Cafetería de Desde elexilio está siempre abierta, para lo que deseen quienes leen esta bitácora.
«Se impone retomar las actitudes de estrecha colaboración entre ambos partidos constitucionalistas que tan excelentes resultados ofrecieron en las anteriores elecciones de mayo de 2001.»
No es por criticar, ¿pero exactamente de dónde se sacan que los resultados fueron mejores para el bloque constitucionalista? Es que si ya nos hacemos el lio en la mera cuestión aritmética vamos mal, muy mal.
En 2005 33 escaños,2001 32 escaños, 1998 32 escaños.