La pregunta retórica del título no hace referencia a la situación geográfica de nuestro país, bien conocida por los alemanes, hartos de quemarse las espaldas en nuestras playas. La pregunta se refiere más bien al papel que España juega hoy en el concierto de la política internacional, que es comparable al del ayudante del chico que coloca las sillas de los violinistas.
Es uno de los logros de Zapatero, ya no se habla de España en el exterior. Leía ayer en ABC un interesante artículo de Ramón Pérez-Maura cargado de verdades y de razón. Hasta hace año y medio, la prensa anglosajona y la alemana estaba llena de referencias a nuestro país en todos los ámbitos. Interesaba lo que allí ocurría. Se publicaban reportajes de fin de semana, se comunicaban tanto asuntos de Gobierno como económicos. Hoy es difícil encontrar una alusión a nuestro país. Pero claro, con actitudes así, no es incomprensible que la prensa extranjera nos dé la espalda:
A lo largo de la Presidencia del Gobierno de Aznar, España se convirtió en un país de cierto interés para los medios de comunicación anglosajones. ¿Son los únicos que cuentan? Ciertamente no, mas convendremos todos que no responden ante un público que se pueda ignorar. Las opiniones públicas británica y norteamericana son extremadamente relevantes en todos los sentidos. Y el mundo entero se hace eco de lo que allí se piensa y dice. Pero esto no parece preocupar al Gobierno español. En los últimos tiempos Zapatero ha denegado repetidamente una entrevista a «The Wall Street Journal» que antaño tenía una buena acogida en Moncloa. El órgano de referencia del mundo empresarial norteamericano es ahora prescindible. Y lo mismo ha ocurrido con «The Economist», la gran revista política británica de circulación planetaria, que siempre ha sido bien atendida en Moncloa. Hace semanas se les concedió una entrevista que debía realizar en Madrid el jefe de Internacional de la revista, John Peet. Horas -casi minutos- antes de entrar en Moncloa, la cita fue cancelada y «The Economist» se quedó sin declaraciones.
Si a eso añadimos que los corresponsales de los medios habituales en nuestro país están inmersos en la misma confusión que lo estamos todos (la semana pasada, el corresponsal en Madrid de la ARD hablaba de la OPA a Endesa. Su colega en Berlín le preguintaba por la situación en Cataluña y una posible reforma de la Constitución. El hombre respondía con un: «aquí nadie sabe muy bien qué está ocurriendo al respecto») redondeamos el pastel. España no interesa y, lo que interesa, está envuelto en el secretismo y depende de la voluntad caprichosa del talantero.
Es que Zapatero who? tiene miedo de que le pregunten cositas sensibles, como el cerrojazo del 11m, la corrupcion en Cataluña o cositas de las que no sabria responder sin sus amiguetes domados de telatrinco o la cuatroenraya o telemanipulacion espanola.
Eso sí, las imágenes de Chaves y compañía aplaudiendo a rabiar y felicitando posteriormente a Mena por su discurso, ya ni las sacan… ni las sacarán. Total, si es que ni pasó.
Habia que ver lo que escribiria el FT si en Escocia se multara a las empresas por usar solo el ingles y no el gaelico.Por poner un ejemplo..
Sí que se habla de españa, de los militares golpistas y del posicionamiento del pp con ellos.En el Financial Times.