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Los que me leen saben que llevo tiempo insistiendo en que esta es la última década que nos queda antes de que la situación española sea irreversible.
Para los que me lean por primera vez me explico:
Nos quedan ahora menos de 9 años para que España, si es que para entonces todavía existe en los actuales términos territoriales, sea un estado fallido o un estado zombi.
¿Por qué?
La natalidad en España está en los 1,38 hijos por mujer, con una edad media de la madre en los nacimientos de 31,3 años (32 en las mujeres españolas). Las mujeres que tendrán hijos en esta década son las que nacieron en la década de los 80 del siglo pasado.
Este año el número de mujeres con 31 años será de 356.000 por lo tanto el número de nacimientos esperados será de 491.300 niños. Esa es una cantidad razonable, con la esperanza de vida actual permitiría mantener una población de unos 40 millones de habitantes (6,5 millones menos que ahora).
El problema es que a partir de los años 80 la natalidad desciende radicalmente y por tanto las mujeres en edad de tener hijos van a descender radicalmente en los próximos años.
A final de década, en el 2020, sólo habrá 254.000 mujeres en edad de tener hijos, con la natalidad actual eso nos daría un total de 350.000 niños, para mantener una población de 28 milllones de habitantes.
A partir del 2020 la máquina infernal de la pirámide invertida de la población destrozará nuestro sistema económico. Con los nacidos a finales de los 50 o principios de los 60 del siglo pasado jubilandose y con jóvenes nacidos a principios de este siglo entrando en el mercado de trabajo el sistema de pensiones, del que para entonces van a depender más de 10 millones de personas, reventará.
Los jóvenes que se incorporen al mercado laboral van a tener que tener que aportar a la Seguridad Social un 100 % más o sino van a tener que aumentar otros impuestos, en cualquier caso ganar un 30 % menos que ahora.
Comparado con la burbuja actual será como la madre de todas las burbujas.
Y no solo eso. Están los gastos médicos que se dispararán y si a eso añadimos una deuda pública que para entonces va a a estar por encima del billón de euros estaremos kaput. Es un hecho.
La imposibilidad de mantener el sistema va a provocar que los intentos secesionistas del Pais Vasco y Cataluña se hagan realidad y eso llevará a un enfrentamiento entre autonomías.
Para ese año también estarán consolidados regímenes islamistas en todo el norte de África.
Todavía estamos a tiempo, dentro de nueve años no. Y quien piense que esta es una crisis «como otras» se equivoca, aunque eso debería ser evidente a estas alturas.
No puedo entrar mucho en detalles porque no tengo suficiente información sobre el tema, pero el que la media de edad de las madres sea de aproximadamente 31 años no implica, creo yo, que solo vayan a dar a luz las mujeres de 31 años como parece desprenderse del parrafo siguiente en el articulo. Hay mas de 356000 mujeres en España que pueden tener hijos. ¿Estoy interpretando mal lo que se dice en el artículo?
Vale, os entiendo. Gracias.
También soy el primero en pensar que un sistema que necesita del crecimiento perpetuo en un mundo no infinito, parece … hmmm, ¿delicado?
Bien, supongamos una sociedad donde no exista el paro, con salarios elevados y con un sistema de pensiones de capitalización, lo cual obviamente no es el caso de España.
En 20 años vamos a tener un déficit de mano de obra de 200.000 personas al año.
Pueden venir esos 200.000 trabajadores de países hispanoamericanos. Pero necesitamos que esos trabajadores estén cualificados para que se mantengan los salarios altos y el pleno empleo.
Sin embargo no es tan fácil atraer esos trabajadores: las personas por regla general no les gusta emigrar a países extranjeros ya sea por cuestiones familiares, de costumbres, de idiosincrasia. En los países hispanoamericanos existe una enorme diferencia entre la clase alta el resto de la población. Es muy difícil que un joven de clase alta y con buena formación venga a España porque en su país va a tener un nivel de vida mucho más alto que lo que pueda tener en España donde las diferencias son menores.
En cualquier caso lo que tendríamos al cabo de 40 años (2052) es que más del 50 % de la población menor de 40 años sería de origen hispanoamericano.
¿Reproducirían sus sociedades de origen en España o se mimetizarían con el entorno?
200.000 0 300.000 personas al año no parecen muchas en comparación con los 6 o 7 millones que nacen al año en los países hispanoamericanos pero si eliminamos a las personas con baja o bajísima cualificación entonces podemos estar hablando de 1 millón de personas. Es decir la emigración a España supondría el 20 % o 30 % de la población cualificada de los países hispanoamericanos. Y eso es mucho teniendo en cuenta que estos países deberían desarrollarse y para eso necesitan imprescindiblemente esa mano de obra cualificada.
Y al cabo de 70 años necesitaríamos casi 400.000 personas al año.
Otra opción es que simplemente la población vaya disminuyendo poco a poco con una sociedad cada vez más envejecida, entonces a final de siglo España tendría la mitad de población que ahora con un 50 % de las personas mayores de 50 años.
Entonces hay otro problema añadido: las inversiones de la gente mayor, de las que en un sistema de capitalización van a depender sus ingresos, podrían sufrir importantes descensos de la rentabilidad. Pensemos en unos jubilados que hayan invertido su capital en un piso y que debido al descenso de la población no puedan alquilarlo y no le puedan sacar rentabilidad. O pensemos en inversiones en empresas españolas con una gran parte de sus ingresos dependientes del mercado español, un descenso de la población podría hacer que sus dividendos y por tanto los ingresos de los jubilados descendiesen.
Evidentemente están todas las posibilidades intermedias con menores descensos de población y pirámides poblacionales más equilibradas.
Sin embargo la realidad es que España tiene más de 5 millones de parados, los salarios no son muy altos, el sistema de pensiones es de «solidaridad intergeneracional», un esquema Ponzi, tenemos una enorme deuda y déficit público. También es de esperar que en los países hispanoamericanos a medida que se desarrollen disminuya la natalidad y por tanto la disponibilidad de mano de obra disminuya también.
En resumen en un «mundo perfecto» es probable que la bajísisma natalidad española no tuviese mayores efectos que una disminución paulatina y no (muy) traumática de la población pero en el mundo real es una bomba de relojería.
Sin duda lo que planteas es catastrófico. Yo me inclino a pensar en que el Estado del bienestar se clausurará antes de llegar a esa situación, porque sólo medio millón de trabajadores manteniendo a 27 millones es una locura, y aún más teniendo en cuenta el escaso nivel formativo que tienen nuestros jóvenes. Me da miedo pensar lo que puede pasarle a mis padres y a mí en el futuro, tras la lectura de tu artículo.
Algo parecido a esto, quizá.
Evidentemente que lo que necesitamos son cotizantes. Por eso digo que nos quedan 9 años.
Pero actualmente lo que tenemos son 5 millones de parados y jóvenes emigrando.
El paro entre los inmigrantes alcanza un pavoroso 38 %.
Pero continuando sí necesitamos cotizantes, pero cotizantes que puedan aportar a la Seguridad Social 750 € al mes y para eso se necesitan empleos con una productividad muy alta.
España carece de multinacionales y tecnología capaces de generar esos empleos. Ese es el drama de España. España carece de cultura empresarial y los jóvenes lo que quieren es ser funcionarios para tener un sueldo seguro y trabajar lo menos posible.
Los empresarios lo que quieren es el negocio seguro protegido por el Estado o la cultura del pelotazo sea el inmobiliario o el fotovoltaico.
La única solución a corto plazo es la Irlandesa: bajos impuestos para atraer a multinacionales extranjeras, pero claro España no es Irlanda: España es mucho más grande y con 17 miniestados y con un 35 % de analfabetos.
Aunque nunca hay que perder la esperanza.
Ah, Mill, es que eso ya parece cambiar. Pasamos de ….
Nos quedan ahora menos de 9 años para que España … sea un estado fallido o un estado zombi.
¿Por qué?
La natalidad en España …
A esto otro:
España carece de multinacionales y tecnología capaces de generar esos empleos. Ese es el drama de España. España carece de cultura empresarial y los jóvenes lo que quieren es ser funcionarios para tener un sueldo seguro y trabajar lo menos posible.
Y así, si. Yo no he dicho que la situación de España no sea un drama – en la medida en que el suicidio colectivo nos parezca un drama. Y la baja natalidad podría ser parte de ese saco. Pero la baja natalidad, aislada y como drama por sí misma, yo todavía no lo veo hasta que no me lo muestren.
Tanto como estado fallido no sé yo.
Y el argumento del invierno demográfico, aunque muy preocupante, no me parece el argumento «fuerte» en este caso, ya que siempre puede venir gente de fuera.
En todo lo demás, estoy de acuerdo: desde la Seguridad Social (esquema de Ponzi) hasta la creación de riqueza por medio de la acumulación de capital e ideas, tiene por delante un panorama sombrío. Pese a todo, yo tengo confianza en que de alguna forma saldremos adelante. Cuando el suelo se desmorona bajo nuestros pies, sólo nos queda caminar. Podemos caminar con otro tipo de enfoque político, con otra mentalidad empresarial, tenemos todo lo necesario para salir.
El problema esta en el asecto cualtativo. Los ex psises del Este exportan ingenieros pero los pasies suadmericanos exportan, una mano de obra bastante menos cualificada. No diagmos el Africa subsarianan. La mano de obra del Maghreb infestada por el islamismo y por el desreconquistismo seria un enorme problema. Y lmuego estan los problemas de delincuencia cuando tus inmigrantes provienen de culturas digamos «menos dociles» agarvada por que se roba mas facimente al extraño que al propio.
@pvl
Mucho me temo que la transición será ordenada. Es decir, que cada vez habrá más cotizaciones (por cada trabajador) y menos réditos. Cotizaremos un mayor porcentaje del coste salarial para obtener unas pensiones menores. Ese desastroso destino vendrá poco a poco, como la rana cocida, mediante pequeñas reformas (atraso en la edad de jubilación, ampliación de la base de cálculo, no actualización de los tramos del IRPF, …) que nos empobrecerán a todos y cada uno de nosotros.
@Placeame ¿Entonces?
Entonces, si la pirámide de la población deja de invertirse y vuelve a tener forma… de pirámide, habremos aplazado la debacle unos años, pero no solucionado el problema. El sistema completo de las pensiones es un esquema Ponzi (piramidal) en el que los réditos que se abonan ahora vienen de las aportaciones que se hacen… ahora. Y en buena medida ocurre lo mismo con la sanidad. Quienes más utilizan la sanidad pública son los que ya no cotizan a ella (jubilados) o no lo hacen todavía (niños). Una pirámide siempre acaba cayendo, aunque antes haya crecido lo indecible (Madof).
P.D.: Como Germánico, como Burrhus, como tantos y tantos, ya estoy preparando mi huída de España…
No, OrcishOzu. Entonces ese es otro problema completamente distinto, que habría que discutir en una entrada dedicada al caso. Porque esta trata de la supuesta bomba de relojería que supone la baja natalidad, y no de Ponzi ni de todas las demás catástrofes que quepan en la imaginación. Y aunque estoy dispuesto a creer en esa bomba en cuanto me la muestren, aun no la he visto.
Plaza, ese es precisamente el problema.
La supuesta bomba de relojería que supone la baja natalidad lo es, única y exclusivamente, porque un sistema piramidal solo se mantiene mientras los aportantes (la base de la pirámide) sean muchos más que los receptores (el ápice).
La baja natalidad es un problema únicamente cuando necesitas mantener una población en forma de pirámide para sostener el «estado del bienestar» en un sistema de reparto. De hecho ni tenemos ni hemos tenido una natalidad sensiblemente inferior que otros países desarrollados que sin embargo no presentan los mismos problemas de sostenibilidad de su estado del bienestar.
Preocuparnos por la baja natalidad es preocuparnos por la fiebre y no por la infección, y los antipiréticos (eg el cheque-bebe) no solucionan la enfermedad, aplacan sus síntomas.
Aún así, no me preocupa la sostenibilidad del sistema, ni aunque este no cambie de raíz puesto que siempre se podrá ir modificando poco a poco (mayores cotizaciones, menores prestaciones) para que no reviente, aunque sea a costa de emigración, bajo crecimiento y reducción del nivel de vida de las clases pasivas…
A ver si consigo que me lo expliquen de una vez, porque nunca lo he entendido. Especialmente en el caso de España, país que me parece privilegiado a ese respecto.
La tesis me parece que da por supuesto que siempre hay un número de puestos de trabajo (y de cotizantes) que coincide con el número de españoles. Pero para mantener «la pirámide» no necesitas españoles, necesitas cotizantes (puestos de trabajo). Si los hay, vendrá gente. Y si no los hay, la pirámide se jode (consume recursos) también por abajo.
Y en España, si te lo montas bien, vendría gente mucho más cercana culturalmente a los que ya estamos dentro que en los casos de los vecinos, como Francia, Italia o Inglaterra. Hablo de Sudamérica, claro.
¿Entonces?
Y te crees que los inmigrantes van a mantener de buen grado a gente con la que no se sieneten ningna realacion? Y no te paraece, digamos imprudente, de hacer venir inmigrantes si esos inmigrantes te odian y desprecian por inial ademas de so&natilde;ar en deshacer la Reconquista.
Precisamente he hablado de Sudamérica, como gran ventaja comparativa de España a ese respecto. Luego los españoles tienen la oportunidad de utilizar esta ventaja, eligiendo / sesgando la inmigración, o no utilizarla. Como tienen la oportunidad de suicidarse o no suicidarse, etc.
Y por ahí nos podemos liar largo y tendido. Pero a mi lo que me interesa de esta entrada es averiguar de una vez si es cierto el argumento de que baja natalidad = drama inevitable, o no.
Efectivamente, el problema demográfico en España combinado con el sacrosanto Estado del Bienestar, es de tal calibre, que todo los demás problemas de nuestro país son pecata minuta. Si en estos 10 años, la sociedad española no es capaz de acometer un cambio revolucionario que consiste básicamente en reducir de manera ordenada al mínimo imprescindible el tamaño del Estado, nos veremos abocados inexorablemente al colapso del Estado: es decir, en cualquier caso, el Estado tal y como lo conocemos actualmente va a desaparecer, y la diferencia estriba sencillamente en si la transformación será controlada o descontrolada.
Por supuesto, cualquiera que se plantee esto hoy en día en España (y en la mayoría de Europa Occidental) es tachado de irresponsable, de catastrofista o de trastornado profeta apocaliptico; cualquier cosa antes de analizar con un mínimo de rigor y objetividad lo que se nos viene encima.
Resumen, «¡A follar, a follar que si no el mundo se acaba!»