Hace unas semanas escribí un artículo denunciando la falta de ética, profesionalidad, la dejadez y la deshonra para su profesión de ciertos periodistas (o lo que sean) que campan por las redacciones. Periodistas que ni siquiera contrastan sus fuentes, que debería ser lo primero. Fueron varios periodistas los que se pusieron en contacto conmigo para decirme que el periodismo está en crisis (tal vez como todo) y que los periodistas «de verdad» no están en las redacciones de los grandes periódicos. Quise y quiero creer lo que me dicen, porque me niego a admitir que tan bella profesión haya caído en la repugnancia que desprende el servilismo. En aquella ocasión fue el diario El País con un artículo sobre Fukushima totalmente inapropiado y sacado de contexto. Ahora es el diario ABC con un artículo en el que, simplemente, se inventan el titular. ¡Se lo inventan! Sin más, y tan tranquilos, que aquí no pasa nada.
El artículo en cuestión pueden leerlo en este enlace y lleva el impactante titular de: «Los arsenales nucleares de Gadafi están a buen recaudo«. Por favor, les pido que lean atentamente el artículo y luego vuelvan a esta web. ¿Lo han leído ya? Efectivamente, la palabra nuclear aparece únicamente en la sentencia que da el título al artículo y ninguna otra vez a lo largo del mismo. ¿Por qué? ¡Porque el artículo no habla de armas nucleares, sino de armas químicas! Es evidente que el autor del mismo no distingue un arma química de un arma nuclear, que es poco menos que no distinguir un condón de una cantimplora. Nuevamente, el artículo viene sin firmar, parece que los periódicos se están convirtiendo en blogs en los que nadie da la cara.
Por contrastar (y yo no soy periodista) he buscado el artículo original que cita el autor del ABC. El artículo en cuestión está en la web de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas y puede leerse en este enlace. Lean, lean y observen cómo la palabra nuclear NO aparece en absoluto en el artículo original. ¿Por qué? ¡Porque es una asociación para la prohibición de armas químicas! No tienen absolutamente nada que ver con la proliferación nuclear. Es decir, el diario ABC SE HA INVENTADO un titular con la palabras mágicas «arsenal nuclear» para componer un titular efectista, alarmista y rotundamente falso. Han cogido el artículo original de la OPCW, se lo han fusilado y le han añadido al principio, como que no quiere la cosa, las palabras mágicas.
Podríamos explicarle al autor parte del programa nuclear libio, que nunca condujo a nada. Podríamos explicarle el papel de Friedich Tinner en ese programa o los contactos del régimen de Gadafi con China. Podríamos explicarle las relaciones de los científicos libios con el programa nuclear pakistaní hasta la muerte de Ali Bhutto. Podríamos aclararle muchas cosas sobre la red clandestina de A.Q.Khan y la compra de centrifugadores en el mercado negro por parte de Libia. Y podríamos explicarle cómo, en 2003-2004, Gadafi decidió poner fin a todo el programa por la que se le venía encima. En definitiva, podríamos explicarle que Libia no tuvo nunca armas nucleares por mucho que lo haya intentado. Pero vamos a dejar que el autor lo estudie solito, a ver si aprende algo. Aunque algo me dice que no lo va a hacer. Lo que de verdad es desolador para el intelecto es que, en un país con 5 millones de parados, el zoquete que ha escrito esto esté trabajando.¿De verdad en ABC, con su seriedad, no han encontrado a alguien mejor en ninguna facultad?
Lo que siempre me pregunto ante estas cosas es: ¿Ignorancia o caradura?
Evidentemente el titular «arsenal nuclear» es más llamativo y puede ser simplemente un truco para subir la audiencia. Asqueroso y rastrero, pero un truco.
Ahora bien, ¿Pensará realmente el periodista-becario que es aproximadamente lo mismo un arsenal nuclear y un arsenal de armas químicas? Y en el ABC. Acojona.
@Ijon Tichy Pues todo, primero ignorancia del que lo escribe. Luego manipulación a la hora de arreglar la noticia para que impacte más y, por último un rostro como un saco de sellos para no pedir perdón cuando te afean la conducta. En definitiva, unos sinvergüenzas.
El problema es gordísimo, y yo sospecho que la prensa lo va a notar, si es que no lo está notando ya. El que quiera basura ya tiene la televisión. Y el drama ahora es que los lectores pueden contrastar las informaciones por sí mismos en internet, y enterarse. Cierto que lo hacen pocos, pero esos pocos hablan, y tienen blogs, y la cosa se transmite. Al final, ¿para qué quieres periódicos cuando te consta que están diciendo burradas todo el rato, o dedicándose al activismo?
Yo he pasado de leer tres al día, a ninguno. Y dudo mucho que sea el único.
Estimado Manuel: completamente de acuerdo en todo lo que has escrito y a continuación enlazo con lo que estoy comentando con Germánico: el ABC solo puede estar interesado en la veracidad de sus «informaciones» si al fin y a la postre esa veracidad le aporta beneficios, es decir si al fin y a la postre los lectores premiamos la veracidad y castigamos la mala información. Por el contrario, si los lectores nos dejamos encandilar simplemente por el llamativo titular «armamento nuclear», y en el fondo (por desconocimiento o incompetencia intelectual) nos da lo mismo «armamento nuclear» que «armamento químico» pues el ABC (en este caso concreto) utilizará y pagará con sumo gusto a un periodista dispuesto a cometer semejante barbaridad informativa antes que a otro que no esté dispuesto a ello. Esta tendencia, es un problema muy serio que desde la ideología liberal con la que en líneas generales me identifico, al menos yo, no he encontrado una respuesta satisfactoria: por exponerlo claramente respecto al caso concreto del ABC: si a al fin y a la postre el interés prioritario del ABC es vender «información» y el público (insisto por desinterés o desconocimiento) no le importa (o incluso prefiere) que le den gato (armamento nuclear) por liebre (armamento químico), ¿hay alguna alternativa?
A quien ha escrito eso le pagarán una mierda, será un pobre becario. Pero ciertamente, por muy mal pagado que esté uno confundir un condón con una cantimplora es grave. Todo el mundo sabe que contienen líquidos distintos. Por cierto, pregunta mi hijo ¿Qué es una cantimplora?
Es posible que los buenos profesionales hayan sido expulsados de sus medios porque les salían muy caros. La calidad tiene un precio, ya se sabe. Y la gente lee cada vez menos el periódico.
Grave es que exista un periodista-becario que lo escriba, pero para mi más grave aún es que quien esta por encima supervisando no diga nada. y seguro que este cobra bastante más que el becario.