Decía Mark Twain en Letters from the Earth: «El hombre es un animal religioso. El hombre es el único animal religioso. Es el único animal que tiene la Verdadera Religión –varias de ellas. Es el único animal que ama a su prójimo como a sí mismo y lo degüella si su teología no es la correcta«.
La conducta humana es lo bastante compleja como para sumir en la desesperación y el desaliento a cualquiera que pretenda compendiarla sin dejar cabos suelto. Pero nadie duda de que el sentimiento de culpabilidad y el miedo a un mañana radicalmente diferente son dos de los más poderosos motores de la acción humana desde que bajamos de los árboles. No hay víctima sin verdugo. No hay pecado sin pecador. No hay mañana sin castigo, penitencia y redención…
Sigan leyendo mi último artículo para la Revista Ideas de Libertad Digital: Climatismo y Herejía. La Hora del Planeta y los nuevos mitos
Creia que el complejo de culpa era un monopolio de las religiones judeo masónica
Toman todo lo malo de la religión y nada de lo bueno.
hola… / lo bueno de la religión es lo que los creyentes interpretan de lo malo.