Alguien puede pensar que nuestros políticos han perdido cualquier rastro de decencia. Pero la cuestión no es esa. El problema es que en las próximas elecciones regionales el PSOE conseguirá 200.000 votos como mínimo.
Da igual la corrupcion, el nepotismo, la incompetencia, que pongan a la mula Francis de candidato, tendrán a 200.000 incondicionales que les votarán. Esa es la tragedia de España. Los políticos no son culpables.
Los ministros de Zapatero siguen dándonos días de gloria. Que no sepan ni hablar correctamente palabras básicas de nuestro idioma ya no debe sorprendernos.
Lo que me asquea es la panda de lameculos que todavía la aplauden.
Estas cosas empiezan con unos gurús y santones que difunden teorías que parecen delirantes. Luego los gurús y santones se convierten en «expertos» y sus ideas en dogmas que hay que explicar a la sociedad.
Dentro de unos años ya no nos reiremos de esta noticia y los que se opongan a la teoría del “amor confluente” seremos tachados de… fachas.
Da igual el fracaso de medio siglo de guerra contra las drogas. Es igual el feroz ataque contra los mas elementales derechos civiles que supone la prohibición de fumar en locales particulares. Ahora toca la alimentación. Y como siempre, con dinero público, empieza la campaña de demonización.
Por supuesto no podían faltar los nazis en este repaso. Hitler llegó al poder gracias a las urnas, que nadie lo olvide.
La democracia sin control acaba en la tiranía de las minorías. Y las minorías muchas veces están dirigidas por auténticos fanáticos.
(*) :
La mayoría de la gente cree que vota con la cartera pero en realidad sólo vota con la bilis que le inyectan los políticos, y sobre todo con las mentiras que se creen.
De todos modos, no nos engañemos, España está gobernada por la cúpula de cuatro o cinco partidos, mientras que una cuarta parte del país no vota.
La información que recibe el 90% de la gente está filtrada por los grandes partidos, lo mismo ocurre con la cultura, la educación.
Menos del 0,5 % de la gente controla toda España.
Redomada sensatez:
Que yo sepa el PSOE gobierna desde el 2004, así que el 80% del «ladrillazo» le corresponde a él. Claro que mientras las cosas iban bien todos felices, ahora a echar la culpa al liberalismo que curiosamente nunca ha gobernado.
Saludos cordiales.
Yo voy a votar al PSOE, para mi lo han hecho bien hasta ahora. Sabiamos que este mal trago del ladrillazo lo iba a heredar gobernase quien gobernase y le ha tocado a Zapatero, tragar con toda la mano de obra barata y los puestos esfumados de curritos paleta. Que hacemos, cuando nos damos cuenta de que los perros no se atan con longanizas? Que hacemos con el «pan para hoy, jambre pa mañana? Los que votaron la «libegalidah» hoy se lamentan, muy hipocritamente acusan; que mala gestion el gobierno socialista! Señores; la crisis mundial no es culpa de Zapatero, es de ustedes, tiranos con cartera. Ustedes que se esconden tras la corbata y los folios en blanco, tras la impecable pluma Mont Blanc y sus aires de importante engominado. Que engañados teneis a los jovenes, hamijos!
Bueno, la culpa será de los electores, pero eso no se la quita a los políticos que son los que finalmente hacen las leyes. Además, si culpas a los votantes, lo correcto sería afirmar que estamos ante la dictadura de las mayorias.
Mientras Juan Estepaisano vote con la cartera, con su cartera, y se desentienda del bien común, no tendrá derecho a quejarse de sus gobernantes.
Utilidades sectoriales y momentáneas todas, cuando lo importante sería la realización integral, como individuos y como grupos de los ciudadanos en Asturias, en Nueva York o en el distrito de Hortaleza. El desmantelamiento del horizonte vital, la negación misma de ese horizonte, que ha operado la cultura esta de mierda, progresadísima y demagógica, que padecemos no se le oculta a nadie. Las asturianas conciben, en promedio, 0.9 hijos durante su vida fértil.