El 1 de octubre del año 2004, se firmó en Santiago de Compostela el Convenio Internacional de Santiago. Dicho Convenio sentaba las bases para la constitución de un mercado común de energía eléctrica entre el Reino de España y la República Portuguesa. Es decir, desde hace ya algunos años, en la Península Ibérica existe un mercado único de electricidad, compartido por los dos países. Este mercado se llama MIBEL (Mercado Ibérico de Energía Eléctrica) y está gestionado por una empresa llamada OMIE.
Y esto, además de aumentar nuestra cultura general, ¿de qué nos sirve? Pues para saber que, al compartir mercado, los españoles y los portugueses compraríamos la electricidad (los MWh) al mismo precio. Si los dos vamos a la misma tienda a comprar las mismas naranjas, parece lógico que ambos las paguemos al mismo precio. Veamos si esto es cierto, observen la siguiente gráfica donde se muestra la evolución por semestres del precio mayorista de la electricidad en España y Portugal:
Como pueden ver, los precios en ambos países son casi idénticos. Las diferencias son inapreciables y se deben a restricciones en el sistema y a otros tecnicismos de escasa relevancia para lo que nos ocupa. (Corrección de Errores: la fuente de este gráfico no es EUROSTAT, sino OMIE. Daba pereza volver a hacer el gráfico).
Ahora bien, siguiendo con el argumento, si la electricidad en el mercado mayorista cuesta lo mismo sería esperable que los españoles y los portugueses, en nuestras casas, pagáramos un precio similar por la electricidad. Esto sería cierto, al menos, antes de impuestos. Después de aplicar los impuestos la cosa puede cambiar mucho, puesto que cada uno de los dos gobiernos es soberano para sangrar a sus contribuyentes a su antojo.
Sin embargo, sabemos que este razonamiento no es cierto por un motivo fundamental. Volviendo al ejemplo de las naranjas, dos comerciantes que compran las naranjas en el mismo mercado mayorista y al mismo precio no tienen por qué venderlas en sus respectivas fruterías al mismo precio. Uno de ellos puede tener la tienda mucho más lejos que el otro, con lo cual tendrá unos mayores costes de combustible y transporte que tendrá que repercutir en el precio. El otro puede que haya hecho reformas en la tienda, para lo cual ha pedido un préstamo y necesita aumentar el precio de las naranjas para amortizarlo. O puede tener la tienda en un barrio más modesto donde los salarios medios no soportarían un incremento en el precio de las naranjas. Las causas pueden ser múltiples, pero estoy seguro de que captan el matiz.
Es decir, una cosa es lo que cuesta la energía en el mercado mayorista y otra la que cuesta llevarla hasta nuestras casas. Perfecto, entonces si hubiera diferencias entre lo que los españoles y los portugueses pagamos por la electricidad sería debido a la diferencia en coste de nuestras respectivas redes de transporte y distribución. Vale, pues vayamos a los datos oficiales de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (en España) y la Entidade Reguladora dos Serviços Energéticos (en Portugal). ¿Qué nos dicen estos organismos oficiales? Nos dicen que, para el año 2013, el coste de transporte y distribución en España ascendió a 27,65 €/MWh y en Portugal a 36,24 €/MWh.
Es decir, comprar la energía en el mercado y llevarla hasta nuestras casas es más caro en Portugal que en España, de hecho, unos 9 €/MWh más caro (aproximadamente, un 30%). Atendiendo a este razonamiento, los consumidores en Portugal pagarían más por la electricidad que los consumidores en España, si atendemos a los precios antes de pagar los impuestos. Comprobemos esto. Para ello presten atención al siguiente gráfico donde se muestra la evolución de los precios de la electricidad en España y Portugal desde el primer semestre de 2011 hasta ahora. Recordemos que estos precios son para los consumidores domésticos (las casas) y antes de pagar impuestos:
¿Qué? ¿Cómo? Algo no es correcto porque pasa exactamente lo contrario a lo que hemos argumentado hasta ahora. Si el precio en el mercado es el mismo para los dos países y los costes de transporte y distribución en Portugal son más caros que en España, ¿cómo es posible que en nuestro país la electricidad sea mucho más cara que en Portugal? De hecho, en torno al 40% más cara.
Lo que pasa es muy sencillo, muy simple de entender. Lo que pagamos por la electricidad no es simplemente el coste de la misma en el mercado y lo que cuesta llevarla a nuestras casas. Eso es lo que debería ser, lo que realmente deberíamos pagar. Ese coste de llevar la energía hasta nuestros hogares es lo que llamamos Tarifas de Acceso a Redes, o coloquialmente, los Peajes. Lo que sucede es que los políticos de este país, durante muchos años, se han dedicado a meter en los peajes todo tipo de partidas que, simplemente, no deberían estar ahí.
¿Que quiero gastarme miles de millones de euros al años en subvencionar las energías renovables? Hala, con cargo a los peajes. ¿Que quiero subvencionar la cogeneración quemando gas? Con cargo a los peajes. ¿Que a los canarios y a los baleares les cuesta más la electricidad por vivir en una isla? No pasa nada, el resto de españoles pagamos la diferencia con cargo a los peajes. ¿Que no me interesa que la luz suba porque no estoy dispuesto a pagar el precio político? Tampoco pasa nada, generamos un déficit de tarifa y los intereses de la titulación del mismo los pagamos con cargo a los peajes. ¿Que quiero mantener las minas de carbón nacionales abiertas cuando son totalmente ineficientes? Lo hacemos con cargo a los peajes. ¿Que se me antoja cerrar centrales nucleares por motivos políticos? Tampoco pasa nada, indemnizamos a los propietarios con cargo a los peajes. ¿Que a golpe de BOE el sistema eléctrico se me ha ido de las manos y tengo un montón de centrales de gas natural a punto de cerrar? Oiga, aquí están los peajes para asumir cada año cientos de millones de euros sin problemas. Y así, suma y sigue.
Es decir, el problema de altos precios de la electricidad en España no es un problema del sistema eléctrico. Ha quedado claramente demostrado que la raíz del problema radica en los peajes de acceso y en las partidas asociadas a los mismos, que únicamente encarecen la energía eléctrica, materia prima fundamental para el avance de nuestra sociedad. Y debe quedar claro que los peajes se han convertido en un instrumento político en el que los gobiernos de turno hacen y deshacen a su antojo.
Ahora bien, ¿qué es lo que hace, en particular, que haya esa diferencia tan significativa entre el precio en España y en Portugal? ¿Qué hay dentro de los peajes de acceso que provoque esa enorme divergencia entre ambos países? La respuesta es compleja, puesto que son múltiples los factores que afectan a los peajes, tal y como hemos visto. Sin embargo, hay unas partidas mayoritarias claramente identificables que sobresalen sobre las demás.
En el año 2013 (último año del que disponemos datos completos oficiales de la CNMC) la diferencia entre el precio en España y Portugal fueron unos 54 €/MWh (más caro en el caso de España). Pues bien, esa diferencia puede ser explicada en gran medida a partir de tres partidas incluidas en los peajes:
- Primas al régimen especial (renovables + cogeneración) = 38,4 €/MWh
- Costes extrapeninsulares = 7,53 €/MWh
- Amortización del Déficit de Tarifa = 8,09 €/MWh
Insisto, hay otras partidas que influyen a este comportamiento. Pero, sin duda, estas tres son las más significativas. Resulta sorprendente darse cuenta que, las responsables del equivalente al 70% del sobrecoste de la electricidad en España con respecto a Portugal son las primas al régimen especial, de las cuales la inmensa mayoría son energías renovables. Y lo que es aún más llamativo, la mayoría de esas primas las reciben tecnologías ineficientes que no producen ni el 5% de la electricidad en nuestro país.
Por tanto, hay que poner en serias dudas las afirmaciones que suelen decir que las energías renovables ayudan a disminuir el precio de la electricidad. Es cierto que contribuyen a disminuir el precio en el mercado mayorista al ofertar gratis en el mismo, pero si luego hay que pagar las primas en los peajes, los efectos no son ya tan claros. De hecho, con una penetración más baja de renovables como tiene Portugal, los efectos sobre el precio de la electricidad son claros. Nuestros vecinos lusos se aprovechan de la eventual bajada en el precio del mercado mayorista que ocasionan las renovables en España mientras que somos los españoles los que pagamos las primas correspondientes. Yo, francamente, hubiera preferido que las renovables las pusieran ellos y aprovecharnos nosotros.
Pero no todo iba a ser mejor en Portugal. Está visto que el Estado, si no te mete mano en el bolsillo por un sitio lo hará por otro. A pesar de tener un sistema eléctrico sensiblemente más competitivo que el nuestro, el gobierno luso se encarga de destrozar esa ventaja competitiva aumentando de forma asfixiante la presión fiscal sobre los ciudadanos. En la gráfica siguiente pueden observar los precios finales (después de impuestos) que pagamos en España y que pagan en Portugal. Como pueden ver, las diferencias ahora no son tan grandes:
Es descorazonador ver como, a pesar de tener una clara ventaja competitiva con respecto a España, el gobierno portugués le coloca unos impuestos a la electricidad más del doble que en España. De tal modo que, al final, los consumidores pagamos prácticamente lo mismo en ambos países.
Habrá quien diga que, para pagar lo mismo, el prefiere que el dinero se haya gastado en renovables y no en nutrir de impuestos a gobiernos que hacen con los impuestos lo que les da la gana (incluso robarlos). Yo que quieren que les diga, por preferir, preferiría no tener que pagar las primas a las renovables ni los impuestos al gobierno, que la electricidad nos costara lo mismo que en Francia y que nuestra industria ganara en competitividad para poder producir, exportar y generar empleos. Pero todos sabemos que esto no va a pasar…
Déjese de tonterías señor Ricardo. Los datos de la CNMV y la unión europea no son del PP u otro partido político. Los sesgos ideológicos a la hora de razonar son malos compañeros.
El problema de las renovables en España es como se implantaron. Las placas de la época eran poco eficientes y caras, así que para fomentar su instalación se comprometieron a pagar jugosas subvenciones. Si se hubiera pensado un poco más el tema se hubiera llegado a la conclusión de que no era el momento, pero en este país manda la política, no el sentido común.
Con el dinero que se ha gastado en subvenciones a renovables se hubiera podido:
– Investigar en la mejora de la eficiencia de las placas solares hasta hacerlas rentables sin necesidad de subvenciones.
– Idem para la eólica.
– Investigar en la mejora de los filtros de las centrales térmicas para minimizar las emisiones de CO2 (por poner un ejemplo) o cualquier otra forma de reducir la contaminación de nuestras centrales.
– Investigar, en definitiva, como conseguir energía más limpia y barata.
Pero no. Aquí había que implantar energías limpias aunque estaba claro que era un mal negocio. Y ese es el problema de hacer las cosas “porque son buenas”: que a veces nos perdemos otras mejores.
Que nadie se confunda. Estoy a favor de las energías renovables, pero no de las que tenemos ahora ni de como se han instalado. Son caras e ineficientes. Has supuesto (y aún suponen) un gasto enorme. Se han implantado siguiendo una visión cortoplacista típica del político que solo quiere ganar votos y/o favores. Yo así no las quiero.
Un mensaje a los que defienden la energía verde tal y como está ahora: aquí nadie intenta demonizarlas (a diferencia de vosotros, que hacéis lo posible por demonizar al resto), solo estamos intentando demostrar que su implantación, en los términos en que se hizo, fue un error.
Caballero,
Entiendo que ambos estamos muy ocupados para debates sobre opiniones infundadas. Esto no va de opiniones, va de hechos.
Por tanto, le ruego que refute alguna de las tres gráficas que pongo en el artículo. Si no es así, le pediría que se abstuviera de hacernos perder el tiempo.
Se trata de refutar los datos que yo expongo, no de refutar lo que usted cree que yo he dicho.
Muchas gracias.
Políticos y familiares en consejos de administración por empresa
En la siguiente tabla se muestran políticos que han ocupado alguna vez un cargo en un consejo de administración de una empresa.
Nombre Expolíticos
Banco Santander Guillermo de la Dehesa
Matías Rodríguez Inciarte
Abel Matutes
Isabel Tocino
Luis Alberto Salazar Simpson
Gamesa Benita Ferrero Waldner
Acerinox Braulio Medel
Banco Sabadell Carlos Jorge Ramalho
PricewaterhouseCoopers Jordi Sevilla
Jaume Matas Palou
Carmen Becerril
Luis de Guindos Jurado
Endesa Elena Salgado
José María Aznar López
Manuel Pizarro
Pío Cabanillas Alonso
Rodolfo Martín Villa
Luis de Guindos Jurado
Indra Felipe Fernández
Estanislao Rodríguez-Ponga
Amadeus Guillermo de la Dehesa
Criteria CaixaCorp Inmaculada Juan Franch
David K. P. Li
Miguel Noguer Planas
Técnicas Reunidas José Lladó
Javier Gómez Navarro
Acciona Tristán Garel Jones
Javier Solana
Bolsas y Mercados Españoles Joan Hortalà
Telecinco Jose R. Alvarez Rendueles
Abengoa Josep Borrell
Ebro Foods José Barreiro Seoane
Red Eléctrica de España Luis Atienza
Mª Ángeles Amador Millán
Arantxa Mendizábal
Miguel Boyer
José Folgado
Iberdrola Fernando Becker
Manuel Amigo
Braulio Medel
José Luis Olivas Martínez
Ángel Acebes
Enagás José Luis Olivas Martínez
Joseba Andoni Aurrekoetxea
Ramón Pérez Simarro
Enrique Martínez Robles
Corporación MAPFRE Rodrigo de Rato Figaredo
Francisco Ruiz Risueño
José A. Moral Santín
José Manuel Fernández Norniella
Barrick Gold José María Aznar López
Obrascón Huarte Lain Juan Miguel Villar Mir
Repsol Luis Carlos Croissier
Empresa Mixta de Servicios Funerarios Luis María Huete
CLH Miguel Boyer
Actividades de Construcción y Servicios
Gas Natural Felipe González
Narcís Serra
Fomento de Construcciones y Contratas Marcelino Oreja
Nicolás Redondo
Enel Pedro Solbes
Caja Madrid Rodrigo de Rato Figaredo
Pedro Sánchez Pérez-Castejón
Telefónica Luis Fernando Furlán
Javier de Paz
Rodrigo de Rato Figaredo
International Airlines Group José Pedro Pérez-Llorca
John Snow
Rodrigo de Rato Figaredo
Bankia Rodrigo de Rato Figaredo
Virgilio Zapatero
Lo de maquillar las cuentas aumentando el precio del peaje y con cargo a una partida de nombre (pongase el que quiera) y en nuestro caso concreto es Primas al régimen especial (renovables + cogeneración) con objeto de demonizar y simular que las renovables no son rentables no cuela.
Dicho de otra forma ¿Que peaje tendría que pagar unas instalaciones fotovoltaicas distribuidas y conectadas a red de 5,5Kwp por ejemplo de una vivienda unifamiliar cuyo consumo en su mayoría se hará en la propia vivienda? Pero no, las instalaciones fotovoltaicas se hicieron centralizadas, precisamente para ahora poder decir que no son rentables. Pues no, no estoy de acuerdo, se embolsaron el dinero de las subvenciones agotando las partidas que pudieron haberse empleado en instalaciones distribuidas ayudando a ciudadanos de a pie. Además estas instalaciones precisamente generan más cuando más necesario es para el sistema, en los picos de consumo, evitando incluso en algunos casos invertir en nuevas subestaciones infradimensionadas, generando empleo local, mejorando la balanza de pagos y el deficit por cuenta corriente, ………
Pero vamos que el fondo del asunto es que no me creo sus cuentas y me importan tres pepinos el nombre que le asignen a la partida del coste en el peaje para utilizarlo como argumento.
Una cosa está bien clara… los beneficios del desprestigio de las renovables sabemos a quien beneficia no?
Y los beneficios de las compañías eléctricas sabemos también quienes se lo reparten no?
Pues nada seguid intentando manipular en contra de las renovables y en beneficio de las eléctricas, ergo los políticos de la lista que os he acompañado.
Ahí queda eso.
Ricardo,
Su discurso hace tanta agua que se refuta solo:
1) No son mis cuentas, son las del Gobierno de España, la CNMC y la Unión Europea.
2) La generación de paneles solares distribuida que usted propone es la que se ha hecho en Alemania con los consabidos resultados, más de 100.000 millones de euros en primas para nada. Le recomiendo leer el artículo de otro autor de este blog titulado “100.000 millones de euros a la basura: las emisiones de CO2 alemanas como hace 10 años”.
Por favor, venir a un blog liberal a decirnos que defendemos a los políticos cuando lo que siempre hemos defendido es la disminución del Estado a su mínima expresión es, cuanto menos, cómico.
Saludos.
A añadir a lo dicho por Manuel, es una supina soplapollez intentar hacer “quedar mar a las renovables” porque ya desde niño nos meten a clavo y martillo que son lo mejor del universo sin meterse en los detalles escabrosos que tiene cada tecnología (placas solares que han superado su ciclo de vida son tremendamente contaminables al no degradarse si no me falla la memoria y la eólica hace un hijo a los ciclos de las aves). Vamos, que como usted demuestra, cualquiera que escuche “las renovables son un poco puta mierda, por lo menos en España que somos imbéciles y pagamos la investigación del resto del mundo en el sector para quedar de guays” lo que dirá es que “eres un perro de las petroleras, RAAARGH!”
En definitiva, demonizar las renovables es practicamente imposible en el clima green happy actual, solo quedas como un desalmado que solo desea quemar el amazonas. Vamos, que no me cuela lo de que los datos son empolvados para hacer quedar mal a la energía verde, porque actualmente es la forma más fácil de sacar votos. Dices que chapas una nuclear (esta energía que si está demonizada hasta límites insospechables de tal forma que solo plantear montar una de estas y ya te ponen de monstruo para arriba) y que vas aponer unos molinos más y la mayoría de los votantes te adoran.
Eso y que obviamente, de la misma forma que hay “lobbies” de petroleras, tampoco vivamos en terra piruleta y nos creamos que no hay su equivalente verde. Se ha chupado mucho de esa teta, hay muchos intereses políticos, y por muy mal administrada e irresponsablemente se monte, sigue teniendo buena imagen pública, visto asi la verdad es que es bastante chollo suponiendo que mantengas las subvenciones que hacen que el negocio no colapse por su propio peso.
Como apunte final, no, no odio las renovables ni mucho menos. Las presas hacen su trabajo divinamente sin ir más lejos y el día que la fusión nuclear funcione será uno de los faros absolutos de la humanidad como especie, pero la realidad es que la eólica y la solar en la que hemos sido tan “punteros” no ha sido más que un proceso de gallina descabezada de ver quien pone más molinos y placas más rápido para quedar guay sin hacer el previo estudio de rentabilidad y eficiencia. Vamos, que si en lugar de petar el horizonte se hubiese tomado la cosa con calma, podriamos seguir siendo punteros en el tema verde pero con energía bastante más eficiente (no lo mismo que rentable, la eólica está cerca, pero la solar necesita aún bastante trabajo para ser considerada una alternativa en masa fuera de los sistemas de calentamiento de un hogar).
1) Si las cuentas que tu te crees “del gobierno” a pies juntillas son las mismas que las cuentas del PP mal camino llevas.
2) Las instalaciones distribuidas: las emisiones de CO2 alemanas como hace 10 años.
Probablemente haga falta seguir instalando aún más solar fotovoltaica, se ha instalado poco.
La energía nuclear en Alemania es responsable por el abastecimiento del 17,7% de la energía eléctrica nacional en el año 2011, comparado con el 22,4% del año 2010 (wikipedia)
Sin duda han reducido los riesgos de contaminación radiactiva (vease Chernobil, Fukushima…)
Por favor te agradecería nos ilustrases de los accidentes ocurridos en las centrales fotovoltaicas.
Tal vez el aumento de las emisiones de co2 tenga algo que ver con
http://juanjogabina.com/2013/09/01/alemania-apuesta-por-las-plantas-termicas-de-carbon-de-nueva-generacion/
Alemania apuesta por las plantas térmicas de carbón de nueva generación
Las nuevas tecnologías para la generación de electricidad en base a las centrales térmicas de carbón de hulla también están contribuyendo a que el mix de energías haya comenzado a variar en los países avanzados. Tal es el caso de Alemania donde se ha apostado por las nuevas plantas térmicas de carbón de hulla —su precio de importación es muy económico— para la generación de electricidad, con el fin de sustitituir progresivamente sus peligrosas centrales nucleares y sus contaminantes centrales térmicas de lignito y, de paso, las obsoletas e ineficientes centrales de gas de ciclo combinado. Se ha apostado por un nuevo mix donde las energías renovables pierden fuerza. Las emisiones de CO2 se consideran un daño colateral y el cambio climático es tan sólo algo inevitable que sufrirán, sobre todo, aquellos que vengan después. Con todo, no podemos ignorar el esfuerzo de Alemania por ofrecer un mix de energía más sostenible, y a precios competitivos. Acabar con la energía nuclear y con muchas energías fósiles como el gas natural, el fuel-oil y el lignito es un gran paso hacia adelante. Les queda, entre otras cosas, apostar seriamente por el coche eléctrico.
A primera vista, un artículo interesante sobre los costes de capital de la energía fotovoltaica y de la eólica en EE. UU., Reino Unido y Alemania:
http://wattsupwiththat.com/2014/11/21/renewable-energy-solar-and-wind-power-capital-costs-and-effectiveness-compared/
7) Si para escribir MWh, pones una “/” entre “MW” y “h”, queda demasiado evidente que te pones a dar lecciones de algo que no dominas.
1) «…que la culpa la tiene el sr. que guarda la vía». Pues tendrás que explicarte mejor, porque no sé qué vía guardan las energías renovables. Por cierto, es un resumen bastante pobre de lo que dice Don Manuel; se te ha pasado, por ejemplo, esto: «Insisto, hay otras partidas que influyen a [en] este comportamiento».
2) El déficit eléctrico es calculado por la CNMC.
3) El precio al por mayor de la electricidad está en línea con lo que se paga en otros países de Europa. A 30 €/MWh, está claramente por debajo. Luego el sistema no funciona tan mal.
4) Es falso que estemos pagando la electricidad al precio más caro. El precio al que se oferta la electricidad en España es el coste variable, esto es, no incluye los costes fijos. Por tanto, también es rotundamente falso que todas las tecnologías cobren «por encima [de] su precio de rentabilidad». De hecho, ya ha cerrado una central de ciclo combinado al acabarse la subvención que cubría los costes fijos. También ha cerrado la central de Santa María de Garoña, porque no les salía a cuenta hacer las reformas que exigía la CSN. De las centrales térmicas, sospecho que la mayoría están paradas desde que se redujeron notablemente las ayudas al carbón nacional.
5) Respecto al coste de producción por tecnologías, no hay un solo coste por tecnología, sino varios dependiendo de diversos factores como el tamaño de la central y el precio del combustible. En cualquier caso, puedes consultar, por ejemplo, la p. 36 del documento Prospectiva de Generación Eléctrica 2030, de UNESA, diciembre de 2007.
6) Las energías renovables aportan en estos momentos en torno a un 30% del consumo energético anual.
La verdad decir que las renovables son el problema de nuestro agujero negro que es el sistema eléctrico es como decir que la culpa la tiene el sr. que guarda la vía.
Por que me pregunto yo: ¿como puede ser que nuestros sistema de fijación de precios se paga el precio de la tecnología más cara que entra en el pool? ¿Quién dice que las eléctricas tienen ese déficit de tarifa?¿Las eléctricas, el estado, la CNMC?
Por que siguen sin explicar y tu tampoco lo has hecho de donde c… salen esos agujeros de déficit de tarifa. A mi me gustaria saber cuales son los costes operativos en € producir MW/h en las diferentes tecnologías que son el pool. Por que lo que sabemos ahora es que pagamos el MW/h según la más cara. Esto si para alcanzar los 40GW que nuestra economía necesita diariamente debemos paga el último MW/h al precio más caro entonces TODAS las tecnologías cobran,incluida la última, por encima sus precios de rentabilidad. ¿De donde sacan entonces ese déficit?
Te recuerdo que desde el principio el mercado es por un pool de tecnologías donde SOLO la nuclear ni entra ni sale, y representan un 20% de media de la producción, y que la energía generada por renovables solo entra cuando las condiciones medioambientales son lo suficientemente estables para la generación de energía durante un periodo de tiempo largo a lo largo del día.
Hombre, si fuera a otro, pero que me diga usted a mi que no explico de dónde sale el déficit de tarifa… Obviamente no lo explico en este artículo, pero le puedo asegurar que he escrito un buen puñado de artículos al respecto.
Puede usted empezar con mi compendio de “7 artículos para entender el Sistema Eléctrico Español”. Todos y cada uno de estos 7 artículos los encontrará usted en este blog. En particular, el número 7 se titula directamente “El déficit de tarifa”. Le recomiendo encarecidamente que, puesto que parece no diferenciar MWh de MW/h se lea los 7 artículos, haciendo especial hincapié en el primero, donde se explica la diferencia entre potencia instalada (MW) y energía producida (MWh). Le aclaro, desde ya, que los MW/h no son una unidad de utilidad alguna en el sector eléctrico.
Puede continuar con mi artículo titulado “Los windfall profits no existen” para ver cómo funciona el mercado mayorista marginal.
Si sigue teniendo ganas, le recomiendo un artículo titulado “Viajan al pasado para solucionar el déficit de tarifa … y ni así” u otros como el titulado “La luz seguirá subiendo” o “Ingeniería financiera para despistados” o “Y el déficit de tarifa sin solución” o “La nueva burbuja eléctrica” o “Ahorrar sale carísimo” o “La amnistía eléctrica” o “La luz por las nubes, oiga” o “Espero que tengan velas en casa” o “Sistema eléctrico de locos”.
Pero, sobre todo, le recomiendo un artículo especialmente escrito para la gente como usted, que llega avasallando sin argumentos y creyendo que los demás no sabemos nada: “Cerremos los bares…y las nucleares”. Créame, este es su artículo, se lo digo yo.
De vez en cuando, uno encuentra algún artículo en la red que explican de manera evidente y accesible asuntos que de por sí tienen una complejidad enorme y que debido a esa complejidad, es difícil para los profanos extraer conclusiones claras.
Este art. es una de esa raras joyas, que explica de manera elocuente que implica para el bolsillo del consumidor el que nuestros políticos, siguiendo la opinión pública mayoritaria, decidan primar las energías “verdes”.
Enhorabuena al autor.
¡Gracias! Muy informativo.
Respecto a qué preferir para un precio final muy parecido, creo que hay una consideración relevante. Los impuestos los pagan todos y se benefician casi todos — aunque unos más que otros. Las primas las pagan todos igualmente, pero acaban en unos pocos bolsillos de inversores espabilados. Parece que el sistema portugués tendería a redistribuir dinero, de los que tienen más a los que tienen menos si funciona bien; y el sistema español tenderá a concentrar el dinero hacia los que ya tenían más. Se me ocurre pensar.