Efectivamente, la política alemana de los próximos cuatro años tendrá efectos indiscutibles sobre la economía de los llamados piigs. Sin embargo, han sido los alemanes y no los españoles, los italianos, los griegos, los portugueses y los irlandeses los que han decidido que su canciller, Angela Merkel, continúe en su despacho.
Si hiciéramos caso de lo que los correveidiles irlandeses, españoles, italianos, portugueses y griegos han venido contando estos meses por ahí, Merkel jamás habría ganado las elecciones del día 22. Ella es la que impide que los griegos salgan de la bancarrota, los españoles de la crisis, los italianos de la mediocridad política, los portugueses del hoyo y los irlandeses de la deuda impagable. Han sido su política de austeridad y su hegemonismo económico los verdaderos cuasantes de nuestros problemas.
Si hubiésemos podido votar el pasado domingo, Merkel hoy no estaría encabezando las negociaciones para formar gobierno en Alemania. ¿Y si los alemanes hubiesen podido votar en España, Italia, Grecia, Portugal e Irlanda?
Si quiere la respuesta, siga leyendo “Los piigs no votaron a Angela Merkel” en Libertad Digital.
Cosas sesudas sobre economia se han escrto a cientos. Pero creo que alguien tenia que decir esas otras cosas.