Se acuerdan de lo de la «generación prima»? Suenan aún los ecos de los voceros anunciando, proclamando aquello de «tenemos la generación de jóvenes mejor preparada de la historia»?
Olvídenlo, era mentira. Aquí ya se lo habíamos dicho por activa y por pasiva:
Según recoge el informe Panorama de la Educación 2012 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicado hoy, en 2010 el 23,7% de los españoles de entre 15 y 29 años ni estudiaban ni trabajaban.
El 23,7% !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Es la generación ni-ni, la materialización del fracaso de todos los planes educativos de los últimos 20 años. La materialización de la irracionalidad de los padres (entiéndase madres y padres) españoles abandonando su compromiso con la formación y educación de sus hijos, cediendo tamaña responsabilidad a un estado definitivamente incapaz de proporcionar las más mínimas condiciones para el desarrollo competitivo de las facultades de sus administrados más jóvenes.
Mediocridad, envidia ante la excelencia y pánico a todo lo que signifique esfuerzo.
Nuestros jóvenes han crecido en la mediocridad gracias a la demencia igualitarista, sólo ocupada en disimular las carencias de algunos en nombre de una supuesta igualdad de oportunidades. Al mismo tiempo los excelentes veían cómo su esfuerzo no era premiado, sus virtudes envidiadas y las opciones de sobresalir nulas. Y para qué esforzarse por conseguir algo, si en nuestro «estado social de bienestar» los burócratas ya se encargan de que no me falte de nada!
No es tan complicado:
«Enseñar correctamente es trabajo de verdad. Hay que prestar atención individual a los alumnos mientras estos intentan alcanzar un objetivo. Esto es lo que debe ser la educación, o produciremos ciudadanos cada vez más inútiles que no serán capaces de trabajar, de votar razonablemente, ni de mantener relaciones o tratar adecuadamente con sus familias. Necesitamos preguntar qué debe saber hacer un ciudadano en su vida diaria y empezar a enseñarles eso.
Preguntar qué debe saber un niño es simplemente la pregunta equivocada. Los hechos son fáciles de captar mientras se hacen otras cosas. Las capacidades del mundo real requieren constante práctica.
Y necesitamos dejar de tratar a todos los niños de la misma manera. El programa de talla única es una idea absurda. Los niños tienen intereses diferentes. Dejémosles perseguirlos. Un interés es algo terrible de desperdiciar.»
Roger Schank, Noviembre 2010 para Desde el exilio
Sí, tenemos lo que merecemos.
Yo ya estaba enterado, por lo que no me sorprende. Simplemente, agrava mi sensación de que España está naufragando, y confirma mis ideas con respecto a los paradigmas hegemónicos en materia de educación y enseñanza.
Sin embargo, me entero de que Israel está por delante de España, muy por delante, en materia de ni-nis. Un 27%, nada menos. ¿Alguien me lo puede explicar?
Y va a ser muy difícil cambiar las cosas. Nadie parece por la labor.