Elecciones al parlamento en Turingia, Sajonia y Sarre

Ayer se celegbraron en tres estados alemanes elecciones a sus repectivos parlamentos. en plena campaña electoral para la elecciones generales, los resultados de ayer bien podrían leerse como una especie de «primarias». De hecho, en otros países apenas sería posible otra lectura. En Alemania, país de fuerte tradición federal, no es tán facil. Aquí, las elecciones al parlamento de un Land  reflejan antes que nada el clima político local.

En Turingia el CDU no sólo no ha sabido generar las espectativas económicas que sus votantes reclamaron hace cinco años, el asunto de su Presidente Althaus en las pistas de esquí (accidente con resultado de muerte de una esquiadora que pasaba por allí, juicio, condena por conducta temeraria) ha dejado más tocado su gobierno de lo que los analistas pensaban. La izquierda nostálgica del comunismo paternal ha conseguido ir estabilizarse a costa de un partido socialista incapaz de definir sus metas y un discurso populista que, como era de esperar, ha encajado a la perfección en una sociedad – la turingia- empobrecida y desesperanzada. Sin embargo, los verdaderos ganadores de esta eleeción han sido los liberales del FDP. Casi doblan el número de votos de hace 5 años y mejoran su representación en el «Landestag» turingio en 7 escaños.

En Sarre, land minero y de larga tradición socialista que llevaba 10 años bajo un gobierno democristiano, los dos partidos mayoritarios pierden poder. Los resultados del CDU pueden calificarse de catastróficos, perdiendo ocho escaños y dejando el gobierno del Land, tras diez años, en manos de una posible coalicion SPD-Linke-Verdes. Son los ultraizquierdistas (Die Linken) los grandes ganadores de estos comicios. Con un aumento de 11 escaños se quedan a apenas 3 puntos de los socialistas. Sin embargo, el líder socialista Heiko Maas tiene todos las papeletas para convertirse en el nuevo Presidente del Sarre. Los 24 escaños que sumaría una coalición CDU-Liberales no proporcionan una mayoría confortable. Es probable que desde Berlín, y dado el «mordisco» que «Die Lin ke» le ha dado al SPD, presionen para formar un gobierno de coalición SPD-CDU. en cualquier caso, la decisión ha de tomarse pronto, las Generales están a la vuelta de la esquina.

Por fin en Sajonia, el Land en el que vivo, será el Presidente actual, el democristiano Stanislaw Tillich, quien decida cómo gobernar. La opción de ofrecer a los socialistas un gobierno de coalición choca con el enorme aumento de votos y escaños que experimentan los liberales: doblan sus votos y mejoran en 7 escaños, convirtiéndose de forma inesperada en la tercera fuerza parlamentaria igualados con los socialistas. Alegría en las filas del FDP -y en mi casa, claro- y desconcierto en las de los ultraizquierdistas, que pierden dos escaños y muchos votos que creían suyos. Pero la mejor noticia de esta jornada en Sajonia ha sido, sin duda, el bajón espectacular de los ultraderechistas neonazis del NPD, quines pierden 4 escaños y logran entrar en el parlamento por un 0,6% El esfuerzo inversor del gobierno de Tillich, creando tejido industrial y puestos de trabajo, va dando sus frutos y apartando del espectro político a los neonazis. Ya solo falta que los nostálgicos del régmen comunista se den cuanta de que la libertad es mejor que la pobreza subvencionada … en cinco años veremos si la dinámica de «normalización» que se adivina en Sajonia tras estos comicios ha dado sus frutos. Los liberales en el gobierno pueden convertirse en catalizadores del resurgir definitivo de Sajonia.

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