El Gobernador Arnold Schwarzenegger está tan quemado políticamente como lo está la economía californiana. Ya casi nada funciona en el antes llamado «Golden State», despiadadamente endeudado, insalvablemente envejecido e ingobernable. Es la herencia de un «Terminator» abocado a terminar su aventura política de la forma más triste posible: solo y fracasado:
Governor Schwarzenegger introduced the toughest regulations in the U.S. against global warming. Since 2006, under the threat of green job-creating environmental regulations, the unemployment rate has almost doubled, to 9.3%. The threat of higher taxes and tougher environmental regulation has unleashed a business exodus, while the state is teetering on the point of bankruptcy.
De poco servirá el ejemplo de California desgraciadamente…
Por lo menos otra voz que clama en el desierto.
Por si acaso, el Chorchenaguer pone al día su curriculum…
Bueno, Luis, me parece que algo mas de lo que se dice ahi si que hay:
Y aqui la madre del cordero, una frase que te va a gustar:
Asi que no solo de politicas ambientales vive el Homo Californianis Arruinatus.
Javi, cuánta razón llevas.
A mí, desde que los republicanos USA se dedican al socialismo, me parece que ya nada es lo que era.
O que todo sigue igual, no sé muy bien.
Saludos.
Hombre, seamos serios, echar la culpa de que «Choche» se haya cargado el solito, cual película de acción, todo el Estado de California, a su política medioambiental, pasando convenientemente de puntillas sobre a que partido pertenece este hombre y que tipo de políticas se promulgan desde esa formación, es, cuanto menos, sesgado.
Hombre, siendo serio, lo lógico es que el máximo responsable de las defectuosas políticas aplicadas en California sea quien las firmó. Si los partidos en USA funcionasen como aquí (es decir, si fuesen tan sectarios como aquí y la «disciplina de partido» fuese tan enajenante como aquí) debería darte la razón. Pero ello no es así, para suerte de USA, a pesar de experimentos fallidos como Terminator.