El líder de Al-Qaeda en el Norte de África ha llamado a los musulmanes a unirse en una guerra santa contra los gobiernos del Magreb y contra otros objetivos como Francia, España o los Estados Unidos.
El mensaje protestaba contra una «nueva ofensiva colonial» por Occidente en el Norte de África y advierte a los musulmanes contra el apoyo a «regímenes locales de la apostasía y traición«. Lo firma Abu Musab Abdul Wadud, bajo el pseudónimo de Abdelmalek Droukdel, el líder de la rama de Al-Qaeda en el Norte de África también llamada «Al-Qaeda para un Magreb Islámico».
Los ataques contra Francia se producen ahora que parece que con Argelia, su antigua colonia, después de que Sarkozy pidiese perdón a medias por la colonización, las relaciones están mejorando.
En cuanto a España, hace una mención expresa a Ceuta y Melilla:
Esto es porque el día del juicio se acerca y el castigo es inminente. Y cualquiera de estos traicioneros apóstatas que piensa que Francia está en una posición para asegurar su seguridad, les decimos que no están en lo cierto, porque Francia no estará en posición para hacerlo y estarán después preocupados por su seguridad.
«Querida nación, no es concebible para ningún musulmán que quiera al Islam, el hablar del Magreb sin recordar a Ceuta y Melilla, ocupadas por España sin recordar la injusticia sufrida por nuestra nación».
«La complicidad entre España y las organizaciones internacionales como la Liga Árabe, la Conferencia Islámica y las Naciones Unidas es clara».
Así que Droukdel es un mentiroso además de dar la vara con el «fin del mundo que es inminente» (decían que se iba a terminar no sé qué miércoles… así que a lo mejor se ha equivocado de semana). Porque el año pasado la Liga Árabe ya mostró su «apoyo total» a Marruecos para que «recuperase las ciudades ocupadas de Ceuta y Melilla«.
Pero no sólo existen objetivos occidentales. También los hay en el Magreb. El último en sufrir una visita de Al-Qaeda ha sido Mauritania. Hace pocos días anunció que necesitaba la colaboración internacional en su lucha contra el terrorismo. El único problema es que como consecuencia de que los actuales militares en el gobierno derrocaron al anterior presidente del Gobierno, la comunidad internacional se encuentra ahora en un dilema como señala el experto anti-terrorista Oliver Guitta, citado por CSM:
En un comentario para el Middle East Times, Oliver Guitta hizo notar que en Mauritania, los esfuerzos americanos para promover la democracia son contradictorios con su finalidad de eliminar el terrorismo islamista. Guitta señala que el Ejército mauritano derrocó al presidente del país, el Jeque Sidi Ould Abdallahi, en parte porque le consideraban demasiado blando con los terroristas islámicos. Escribió también que muchos mauritanos consideran que Abdallahi es el culpable por permitir que la securidad del país se deteriorase de mal a peor.
Entre otras, podemos acordarnos de las amenazas contra el París-Dakar o el ataque de varios pistoleros de Al-Qaeda contra la embajada israelí en Mauritania para exigir que dejara de tener relaciones con el estado judío.
Pues bien, hace tres días, una patrulla del ejército mauritano iba realizando su recorrido habitual cerca de una zona minera, cuando fueron sorprendidos por terroristas de Al-Qaeda. La patrulla fue secuestrada y ayer los cadáveres decapitados de los soldados fueron encontrados abandonados a las afueras de una aldea de la zona minera. Mauritania ha declarado tres días de luto oficial.
Eso sí, la situación de Mauritania me recuerda mucho a la de Turquía. ¿O no?
