Este año ha sido el primero en que el Querido Líder no ha estado presente en el desfile militar de la Fiesta Nacional norcoreana. Teniendo en cuenta que el Ejército es lo primero, lo último y todo lo que hay en medio para Kim il-Jong, su no presencia en el desfile, unida a su mala salud (padece diabetes y ha tenido varios ataques al corazón entre otras dolencias), han disparado los rumores de que está con una salud muy precaria.
Pajamas Media, en un artículo titulado Will China Take Over North Korea?, explica por qué los movimientos de China respecto de Corea del Norte son muy sospechosos. En primer lugar:
Han rechazado recientemente iniciativas de Seúl para hablar sobre lo que se debería hacer en caso de inestabilidad en Corea del Norte. El rechazo es una indicación de que Pekín no cree que tendrá que mejorar sus planes de mandar una fuerza militar para establecer el orden y ,o bien anexionarse Corea del Norte o, lo más probable, dejar atrás un gobierno complaciente. Después de todo, ya ha conseguido alinear a todos sus apoyos en Pyongyang y ve pocas razones para compartir información o dejar que cualquier otra nación tenga acceso en caso de emergencia.
Pero además hay otra cuestión: la sucesión del Querido Líder. Kim il-Jong accedió al poder (la Jefatura de la Comisión de Defensa Nacional, así de importante es el Ejército) a la muerte de su padre, Kim il-Sung, el fundador de Corea del Norte como nación. Para ello, fue preparado desde niño. Pero no ocurre así ahora:
Ninguno de los hijos de Kim está considerado como un sucesor aconsejable y el Querido Líder no ha educado a ninguno como su padre le educó a él durante décadas. Como el ejército es la única institución social que puede cumplir sus objetivos, muchos asumen que uno o más de los generales ascenderán al poder cuando Kim desaparezcan de la escena. La apuesta es que un comité formado por varios acabará gobernando Corea del Norte.
Esta posibilidad hace aún más felices a los políticos chinos, que precisamente gobiernan el país del billón y medio de personas a través de un politburó: cualquier negociación siempre será mucho más cómoda con un comité porque será bastante más predecible que Kim.
De modo que la reunificación de las dos Coreas, un sueño común a todos los que viven al Sur de la Zona Desmilitarizada, queda aún más lejos si cabe.
Que conste que ya lo advertía el Foreign Policy Blog hace unos meses, como traté aquí.
Ahora bien, ¿es cierto que ahora Kim está enfermo? Eso nadie lo sabe: el hermetismo norcoreano es tal y como resume el WaPo:
Ahora bien, en los últimos meses, varios medios han informado de que Kim estaba tan débil que no podía andar 20 yardas (después apareció en público y parecía poder andar), que un grupo de doctores alemanes había ido a Corea del Norte para realizarle una operación de corazón (los doctores lo negaron) y que se había muerto (bastante poco probable porque desde entonces, ha aparecido en público aunque algún veterano ha sugerido que el Gobierno puede estar usando dobles).
Por último, investigadores de EEUU han descubierto que Corea del Norte está construyendo otra rampa de lanzamiento de misiles nucleares. Pero ¿de qué misiles nucleares si ya había acordado destruir su arsenal nuclear como consecuencia de la prueba nuclear del año pasado? Precisamente es ahora cuando se debería decidir cómo se verifica la información sobre sus instalaciones nucleares que Corea entregó a EEUU en su momento. Pero no se ha llegado a un acuerdo sobre dicha verificación, lo que complica las cosas: Corea del Norte pensaba que iba a ser retirada de la lista de estados que patrocinan el terrorismo con sólo entregar la información. Así que, como no ha sido retirada de la lista, parece que está volviendo a construir su principal planta de construcción de bombas nucleares, la Yongbyon, cerrada en julio del año pasado.
Lo que también es favorable a China: si ampara a Corea del Norte en sus ambiciones nucleares (aunque no sea abiertamente), los coreanos, especialmente los que son afines a Pekín, le devolverán el «favor» cuando el momento llegue.
Como dice China e-Lobby, «tomen nota de que la saga sobre su salud ha sido la perfecta cobertura para más construcción de misiles«. Lo que sin embargo, no resta importancia a lo que ocurra una vez que efectivamente haya fallecido.