Los resultados de la muy cacareada «alegría» socialista se han visto reflejados muy pronto en mi casa, mis hijos traen a menudo las fichas del colegio con hermosas palabras tachadas en carmín. Son palabras que escucharon de sus abuelas cuando aún no sabían hablar, son las palabras primeras: «almendra», «rana», «cocodrilo». Todas tachadas, Zapatero y sus amigos normalizadores dicen que no son así, que el cocodrilo se dice «crocodrilo», que la almendra es «améndoa» y que mis hijos no tienen ni idea de cómo se habla y como se escribe, que lo dice el comité, que está para eso, para salvarnos de nuestra impertinente y ofensiva costumbre de comunicarnos en español en España.
Breve, certero y en un español absolutamente impecable. Así son los artículos de Juan Granados. Léanlo entero.
Copio a un lector:
«…Va a ganar el PP. En votos y en escaños. El PP va a sacar más de 10,5 millones de votos y se acercará a los 11. Los 10,4 que votaron en el 2000 y unos cuantos más, alarmados por la deriva del país.
Y si no es así, autoinglés.
Yo ya estoy pensando en hacer las maletas. De momento, de Donostia a Zaragoza. Siempre sije que una de estas dos cosas me echaría del País Vasco: La «cartita» y la Consejería de euskaldunización. Esta última, con la miserable colaboración de la Iglesia vasca, que se ha prostituido gustosa por un plato de lentejas, ha perpetrado un infumable e ilegal Decreto que obliga de facto a escolarizar a los niños en euskera, esa lengua universal de tanto futuro.
Y para tapar la victoria parcial en el TSJA con la objeción de conciencia, con nocturnidad y alevosía van a obligar a escolarizar a todos los niños a partir de los 2 años. No vaya a ser que si van más tardes traigan de casa ideas poco convenientes. Esto es lo que pasa cuando dejas a EA la Consejería de Educación, hoy de Euskaldunización.
El PSOE ha votado hoy en contra de tres textos diferentes presentados por el PP en las Juntas Generales de Álava pidiendo el mantenimiento de los actuales modelos y el respeto al derecho de los padres a elegir la lengua de escolarización de sus hijos. Lo pagarán el domingo, sin duda.
Padres de Vitoria van a constituir una cooperativa de enseñanza para que sus hijos puedan estudiar … ¡en Miranda de Ebro!. En San Sebastián, nadie se atreve a dar ese paso. Algunos, cruzan el Bidasoa y escolarizan a sus hijos en Francia. No está mal, pero prefiero cruzar el Ebro y volver a mi tierra chica y grande, la única capaz de sobrevivir a sucesivos gobiernos socialistas gracias al proverbial individualismo aragonés.
Y eso que a Mariano los medios lo están despellejando: «El PP quiere el trasvase», claman. Callan que «después de haber ejecutado las obras del Pacto del Agua».
Si fuera político, pediría una desaladora…»