Al final no sirvieron de nada las manifestaciones. 16 hombres han sido ejecutados públicamente en Irán la pasada semana, la mayoría de ellos por un delito de homosexualidad. Hossein Alizadeh y Grace Poore, miembros de la "International Gay and Lesbian Human Rights Commission", informan además de que muchos de los ejecutados formaban parte de organizaciones políticas opuestas al régimen iraní.
Mientras estas cosas suceden, nuestro Ministro Moratinos vuelve a hacer gala de los estrechos lazos que unen a nuestro gobierno con lo peor del panorama terrorista mundial. A estos les da igual si son etarras o islamistas radicales. Si llevan pistolas son amigos. Y si matan judíos, guardias civiles, derechistas y yankees, pues más amigos todavía. Son nuestros "demócratas de toda la vida".