Si viviese en Madrid escribiría una pancarta enorme con una sola palabra: COHERENCIA, y me iría todos los días a dar un paseo por delante de los Ministerios de Asuntos Exteriores y Defensa. Somos un país occidental o no lo somos? Estamos en la OTAN o no lo estamos? Somos miembros de la Unión Europea o no lo somos? Defendemos la democracia siempre o sólo a veces? Nuestros aliados son una imposición de las políticas anteriores o son nuestros aliados? Y es que, a veces, no me entero.
He aquí que Zapatero se ha echado en brazos de Marruecos y se ha puesto a darse besos de tornillo con ese régimen tan fino, tan moderno y tan democrático. Más aún: nuestro hombre ha respaldado con entusiasmo el plan alauita de autonomía del Sáhara. Ante lo cual los saharauis, haciendo gala una vez más de su ponderación y su cintura diplomática, de esa civilizada sensatez que es justamente lo opuesto a la barbarie terrorista, se han limitado a «lamentar la precipitación del Gobierno español para apoyar el plan marroquí», en vez de acordarse de los antepasados de Zapatero y de paso de las madres de todos nosotros, como sería lo propio ante semejante muestra de oportunismo político y de lastimoso abandono de nuestras responsabilidades. Como los saharauis dicen (pero casi ningún medio recoge), un proyecto de autonomía para el Sáhara Occidental no tiene base legal, porque ese territorio no es una provincia marroquí. Y la posición de Zapatero, añaden, no hace más que alentar «las ambiciones expansionistas marroquíes en detrimento de la legalidad internacional» . Además, añado yo, de dejar a los pobres saharauis aún más inermes ante la ferocidad represiva de Marruecos.
Ciertamente asombra que este Zapatero tan preocupado por atender las ansias nacionalistas de todo pichichi, resulte estar de repente sordo como una tapia cuando se enfrenta no ya a una reivindicació n de independentismo, sino a un caso ejemplar de territorio ocupado ilegalmente por un país vecino. Los saharauis fueron invadidos, perseguidos, bombardeados por los marroquíes. Y hay resoluciones de la ONU que les amparan. Se diría que todo eso se lo pasa Zapatero por el talante. Tampoco acabo de entender que nuestro paladín de las civilizaciones aliadas dé la espalda de manera tan olímpica a un pueblo islámico moderno que apuesta por la vía diplomática y no por el terrorismo. Qué malísimo ejemplo estamos dando cuando no escuchamos a los pacíficos. Claro que tampoco estamos haciendo gran cosa por otras víctimas, las de la dictadura cubana. También ahí estamos extrañamente tibios, extrañamente dudosos, demasiado cerca de los verdugos. Es una política internacional desconcertante.
Artículo de Rosa Montero en «El País» de hoy. De pago
Estimada Rosa, no te extrañe. Leyendo cómo argumenta nuestro Ministro de Defensa, queda todo perfectamente claro:
El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, ha afirmado que «jamás» hay que «ceder» ante las amenazas realizadas por grupos relacionados con el terrorismo islamista contra países de la comunidad internacional que «están por un mundo más justo, por un mundo mejor, por un mundo en paz y por un mundo más estable».
El titular de Defensa ha indicado que «amenazas por parte del terrorismo internacional ha habido varias a lo largo de los últimos años, y ésta tiene todo el aspecto de ser una más de esas varias amenazas que han recibido diferentes países de la comunidad internacional». El ministro ha defendido que «hay que estar siempre en guardia frente al terrorismo internacional», ya que se trata de «un asunto muy peligroso y que nos debe tener siempre muy preocupados y con la guardia muy alta». Fuente
O sea, que si la amenaza es contra, digamos Corea del Norte o China, no ha de ser tenida en cuenta. O eran Los EEUU los malos? No, seguro que está excluyendo a países como Venezuela o Irán. O me equivoco? Además no importa. Es una amenaza más, una de tantas. La última frase, si es literal (y confío en la seriedad del ABC), es impropia de un señor (o señora) con cargo de Ministro (o Ministra).
Para el lector insaciable de prensa española recomiendo este blog (http://www.lacoctelera.com/reggio) dedicado exclusivamente a la publicación de todas las columnas de opinión de los periódicos más importantes de nuestro país, con atención particular a los medios asturianos por vivir su autor en Asturias.
Yo lo tengo en mi agregador y me lo repaso todo en un santiamén. El resultado de ese repaso suele ser bastante deprimente.
Saludos.
Estas son las cosas que me hacen pensar que El País no es siempre tan escandalosamente partidista; bueno, o por lo menos la gente que escribe en dicho periódico (A día de hoy me sigo quedando con las líneas que suele escribir el Sr. Vargas Llosa).
Por cierto Herr Gomes, mi niña se ha ido a trabajar a Casablanca, así que si en algún momento necesita información de primera mano hágamelo saber 😀
Besitos
PD-> ¿Todavía sigues pagando por leer El País? Creo que hay un sitio web donde te puedes bajar todos los días un archivo torrent para que los parias de la tierra podamos leer el diario independiente de la mañana. 😀