Maldito capitalismo

Ese nefasto sistema que ha conseguido aumentar las calorías per cápita diarias, disminuir la mortalidad infantil, aumentar la esperanza de vida, mejorar el acceso al agua potable, aumentar el índice de personas con estudios universitarios, reducir drásticamente el índice de trabajo infantil, ….

Se que más de uno ya tiene en los labios escrito un «en los países ricos!» Pues no. Me refiero a los países pobres. En concreto a las rentas más bajas. Los datos obtenidos por Indur M. Goklany los tenemos en su «The Improving State of the World«, del que podemos leer un resumen aquí ,

Since the 1960s, the daily food intake in poor countries has increased by 38 per cent (to 2,666 calories per person). This has happened even though the population of these countries has almost doubled, by 83 per cent.

The consequence, when combined with a 75 per cent decline in global food prices (adjusted for inflation), has been that chronic undernourishment has dropped by half, from one-third of the population of poor countries to just under one-fifth – 17 per cent.

Education is far more widely available. The global illiteracy rate has been more than halved, from 46 per cent in 1970 to 18 per cent today. One reason for this has been a sharp decline in the proportion of children working.

y del que les dejo con una gráfica (pulsen sobre ella para ampliar) más que interesante:

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Via «Mit dem Kopf voran«

Luis I. Gómez
Luis I. Gómez

Si conseguimos actuar, pensar, sentir y querer ser quien soñamos ser habremos dado el primer paso de nuestra personal “guerra de autodeterminación”. Por esto es importante ser uno mismo quien cuide y atienda las propias necesidades. No limitarse a sentir los beneficios de la libertad, sino llenar los días de gestos que nos permitan experimentarla con otras personas.

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5 comentarios

  1. Luis, no creo que sea obra del capitalismo, sino de la propia evolución del ser humano tanto, a nivel técnico como científico, con independencia del sistema económico-social.

  2. Maldito capitalismo, maldita globalización. Nada hay como la vida en el África del siglo XII. Sin ideas fascistas ni injerencias de multinacionales.

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