Como si hubiesen leído mi cuento de ayer. Como si mis cuentos no fueran tales. Las Iglesias, los sindicatos y la patronal Alemana conminan al Ministro de Trabajo para solucionar el grave problema del paro en alemania.
La agrupación alemana de Sindicatos (DGB) por boca de su presidente Michael Sommer decía hoy en el Bild-Zeitung: » Clement debería sentar a una mesa a todos los afectados: Gobierno, Banco Central, Patronal y Sindicatos».
» Para conseguir nuevos puestos de trabajo necesitamos costes laborales más bajos», dijo también hoy el Presidente del ZDH (Central Alemana de Manufactureros) Otto Kentzler.
«Lo más importante, creo yo, es que el Ministro se ocupe de manera especial del paro juvenil, que no pierda de vista las prioridades en los Länder del este…» dijo la Obispo Evangélica Maria Jespen.
Los católicos también opinaron. Por boca del presidente de la Conferencia Episcopal Karl Lehmann: «las personas tienen derecho a participar del mercado laboral» (supongo que se refería a su coordinación), dijo en el «Welt am Sonntag»
Y es que no hay como los fracasos del Estado para poner a todos de acuerdo. Qué risa.