Que conste que yo hace ya mucho tiempo que considero a la ONU un atajo inútil de ladrones y oportunistas. Pero claro, hay muchísima gente que para justificar su antiamericanismo son capaces de beatificar al mismísimo Saddam. La «guerra» de Irak es un tema de esos complejos. Si uno lee las consignas progrepancarteras, resulta que los USA están allí matando iraquíes y robando los tesoros del país.
Debe de ser que en Irak hay muy pocos progrepancarteros. De otra forma es inexplicable que Irak haya rogado a la ONU (a la vista de la efectividad de los progrepancarteros en la mismísima USA, que habían conseguido un principio de acuerdo para abandonar el país) que NO retire SUS (las de la ONU, noten) tropas bajo mando USA del país. Y, contra todo pronóstico (no era la ONU la bandera de los «buenos»?) la ONU ha decidido que los irakíes y los malvadísimos USA tienen razón: una vez eliminado el dictador genocida no se puede dejar el país en manos de los terroristas y los asesinos, por mucho pancartero que opine lo contrario.
Ahora ya sólo falta que Zapatero envíe tropas de nuevo a Irak. Bajo mando ruso, tal vez.
De paso, los pancarteros de toda condición (progres, conservadores, liberales) podían alzar su voz para protestar por la insostenible situación de los cristianos en Irak: asesinados, secuestrados, obligados a pagar como dhimmis que son,…
¿A alguien le suena el nombre de Ragheed Ganni? Pues es un sacerdote caldeo asesinado con saña el 3 de Junio en Mosul cuando regresaba a casa tras la Misa dominical. ¿Y Hani Abdel Ahad? Otro sacerdote iraquí secuestrado el 6 de Junio en Bagdad. Dice Monseñor Shlemon Warduni, del patriarcado caldeo en Bagdad: «Si algo parecido hubiese ocurrido en cualquier población musulmana, las masas musulmanas se habrían manifestado para protestar y pedir respeto, como ocurrió con las viñetas satíricas. Sin embargo, los cristianos no están haciendo nada mientras aquí los cristianos morimos, nos secuestran, nos obligan a convertirnos al islam o a pagar para obtener protección, a ceder a las hijas para evitar represalias o a huir dejando atrás todo el trabajo de una vida. En los Estados Unidos y en Europa, solo hay silencio. Cuando el padre Ragheed Ganni fue asesinado nadie se solidarizó con nosotros. Solamente el Papa envió un telegrama de conodolencia y alzó la voz para que se conociese la tragedia de los cristianos iraquíes».
Y no sólo en Irak. ¿A alguien le suena el nombre de Giancarlo Bossi? Pues es un sacerdote italiano misionero en Filipinas, secuestrado en Mindanao por, más que presublimente, la guerrilla islamista.
No espero de los progrepancarteros la mínima solidaridad , ¿pero qué ocurre con los demás? En especial, ¿qué nos ocurre a todos los cristianos de Occidente? ¿Por qué en un país como Italia tiene que ser Magdi Allam, periodista de origen egipcio y musulmán, quien tome la iniciativa de convocar una manifestación en solidaridad con los cristianos perseguidos en Medio Oriente? (http://www.corriere.it/Primo_Piano/Esteri/2007/06_Giugno/13/magdi.shtml)